Y eso que el Agua es un Derecho.
Pero privatizado arbitrariamente en Colombia con anuencia de gobernantes corruptos, muchas/os hoy Candidatos a Gobernaciones y Alcaldías que mienten, cuando liberan de su responsabilidad dolida a quienes privatizan el agua.
Y las transnacionales la venden, los Ingenios azucareros se enriquecen con el agua que roban desviando los ríos y que extraen de nuestro subsuelo freático.
Hay que recordar que el agua nace libre, a élla no se le puede encarcelar en los bolsillos de sus comerciantes, ni negarla a la vida y la salud del Ser Humano.
! El neoliberalismo es perverso !
A estos tiranos que sumen en morbilidad y la muerte a nuestra niñez, ancianos, enfermos y población les manifiesto que todos los habitantes ya víctimas de ustedes no nos queda sino ejercer la Declaración Universal de los Derechos de los Pueblos o de Argel de 1976 que nos permite en estos casos catastróficos y de calamidad pública: ! Derrocar al Tirano !
Hagamos honor a nuestra Compañera SANDRA CUÉLLAR desaparecida forzada, afirman que por la Policía en el Paso del Comercio encima del Río Cauca, por luchar junto a nosotros para lograr que el Agua sea un Derecho Humano Fundamental.
Las/os Candidatos en estas Elecciones que se saben responsables que renuncien.
La Justicia Colombiana en vez de hacer montajes judiciales, perseguir, extraditar y detener a trabajadores, a campesinos, estudiantes, profesores y al movimiento popular por ejercer la libertad de expresión y conciencia, usando la justicia de manera perversa como arma de guerra contra la Oposición Política, se dedique mejor de manera oficiosa a iniciar acciones legales en pro de los Derechos de la Población. Si no lo hacen pues se alinean con los tiranos y la Justicia Popular los deslegitima mucho más de lo que ya están.
! Y qué no decir de los Entes de control !
Ya nadie cree en este Estado corrupto, indicativo y muestra sintomática es la última encuesta donde predomina el Voto en Blanco sobre Candidatos a Gobernaciones y Alcaldías donde no hay agua y que en sus sistemáticas mentiras calumnian hasta al «niño».
¿Y los padres, ya tiranos, qué?