Redacción
Noticias de actualidad | Buenaventuraenlinea
Si a mediados de abril las tormentas causaron estragos en los estados del sur, la situación empeoró estos días, cuando varios tornados golpearon en las mismas zonas, provocando la muerte de al menos 250 personas. El estado más castigado sigue siendo Alabama, según confirmó un portavoz de la Agencia de Gestión de Desastres (FEMA). Ha sido la jornada de tornados más trágica desde 1974.
El poder destructivo de los tornados se multiplicaron a lo largo de cuatro estados, provocando importantes daños materiales, destrozando viviendas y bloqueando varias carreteras por los árboles y postes caídos. En algunos lugares, la fuerza del viento derribó hasta el 90 por ciento de los árboles.
La cadena televisiva CNN informó que cientos de miles de ciudadanos se quedaron sin electricidad, sobre todo en Birmingham. La situación obligó a la Guardia Nacional a enviar a cientos de soldados a las áreas más afectadas.
Dolor del presidente
Barack Obama declaró el estado de emergencia en Alabama, Arkansas, Tennessee y buena parte de Misisipi y se dirigió al país en un comunicado. Obama reconoció que aún no se pueden cuantificar los daños, pero que “la situación durará unos días más, seguimos muy de cerca las fuertes tormentas en nuestro país y estamos dispuestos a seguir ayudando al pueblo de Alabama y a todos los ciudadanos afectados”.
El presidente también mostró su dolor por la pérdida de vidas, “Michelle y yo ofrecemos nuestras más profundas condolencias a los familiares de aquellos que han perdido la vida debido a los tornados que han azotado Alabama y todo el sudeste de EE.UU.”.
En las próximas horas, el violento fenómeno podría cruzar al vecino estado de Georgia. Las tormentas se desplazaron al este desde el centro del país, afectado en días pasados, cuando murieron 47 personas desde Oklahoma hasta Carolina del Norte por el temporal.
Numerosas inundaciones unidas al agua del deshielo ocasionaron grandes crecidas en varios ríos de la zona. El Servicio Nacional de Meteorología de Estados Unidos alerta de la llegada de tormentas importantes y de tornados desde Luisiana a Nueva York.
En Arkansas, murieron 55 personas y en Misisipi fueron 35. Una de las víctimas del temporal fue un trabajador de los servicios de emergencia que intentó retirar un árbol de las vías del ferrocarril. También en el norte de Texas hubo algunos tornados, afortunadamente sin víctimas. En Tennessee, las lluvias provocaron cortes de luz y de carreteras.