CHICAGO – Denny Hamlin ganó la posición de privilegio el sábado en la primera carrera callejera de la NASCAR Cup Series, superando a Tyler Reddick en la desafiante pista del centro de Chicago.
Hamlin lideró la carrera del domingo con una vuelta de 88.435 segundos a una velocidad promedio de 89.557 mph en el recorrido de 12 curvas y 2.2 millas. Es su tercera pole de la temporada y la 39 de su carrera.
«Simplemente fue un gran día», dijo Hamlin, quien busca su victoria número 50 en la Serie de la Copa. «Probablemente mi mejor día en la pista de carreras en toda mi carrera, seguro».
Reddick fue segundo con 88.479 segundos, seguido por Shane van Gisbergen en su primer evento de NASCAR y Christopher Bell. Daniel Suárez completó los cinco primeros en 89.322 segundos.
Con Hamlin, Reddick y Bell, Toyota tenía tres de los cuatro mejores autos. Hamlin y Bell son compañeros de equipo en Joe Gibbs Racing, y van Gisbergen y Suárez conducen para Trackhouse Racing.
«La pista tiene mucho agarre», dijo Reddick. «Tiene mucho carácter en muchas áreas, pero tiene mucho agarre. Realmente lo tiene, y el auto Next Gen ha tenido mucho agarre en muchos circuitos».
«Así que, sinceramente, es muy divertido. Hay algunas áreas realmente complicadas que serán muy estresantes para los conductores de Xfinity y de la Copa mañana. Veremos cómo va».
Reddick corre para 23XI Racing, propiedad de Hamlin y Michael Jordan, alguien que sabe mucho sobre el éxito en Chicago. Jordan ganó seis títulos de la NBA con los Bulls durante su carrera en el Salón de la Fama.
«Él está entusiasmado, ya sea que tengamos un buen desempeño en North Wilkesboro o que estemos aquí en Chicago, honestamente», dijo Hamlin. «Es una gran ciudad para él. Obviamente ha hecho mucho por esta ciudad y esta ciudad hizo mucho por él».
Van Gisbergen, de 34 años, tres veces campeón de Supercars, es el último piloto internacional en probar la serie principal de NASCAR como parte del Proyecto 91 de Trackhouse. El objetivo del equipo es expandir su alcance global.
«Tengo un poco que aprender», dijo van Gisbergen, nativo de Nueva Zelanda. «Estaba aprendiendo cada vuelta, tratando de empujar, y sí, fue muy divertido».
