30 de julio: Se vio a unos hombres salir de una residencia del vecindario de Logan «a toda prisa» con un monitor de computadora poco después de un homicidio, según registros judiciales.
La policía respondió a múltiples llamadas de homicidio y al sonido de disparos el 21 de julio dentro de una casa en North Hamilton Street. Una de las personas que llamó dijo que era el hijo de la víctima. Fue a ver cómo estaba como lo hace todas las mañanas y la encontró muerta en el dormitorio principal, según los registros judiciales. Los documentos la identifican como Jackie Wessels.
Cuando entró en la casa, se encontró con un hombre que trabajaba la madera en el porche trasero. Una vez que encontró a su madre, volvió a salir y le preguntó qué había pasado, según los registros judiciales. El hombre dijo que no sabía, pero que iba a irse antes de que llegaran las fuerzas del orden porque tenía órdenes de arresto pendientes.
Los vecinos entrevistados por la policía indicaron que vieron una camioneta oscura que se detuvo en el callejón al lado de la casa y que vieron a dos hombres salir y entrar en la casa. Se observó que uno era un hombre blanco de entre 50 y 60 años, y el otro era un hombre blanco de entre 30 y 39 años.
Ambos hombres salieron apresuradamente de la casa con un monitor de computadora y una bolsa negra, según documentos judiciales, y se marcharon.
Un inquilino de la casa que fue entrevistado dijo que ese día vio a dos hombres en la sala de estar con una pistola sobre la mesa. El inquilino se fue a la gasolinera, recogió a una chica allí y regresó a la casa y comenzó a consumir metanfetamina con ella. Fue entonces cuando oyeron fuertes explosiones en la planta baja, según los registros judiciales. El inquilino bajó y llamó al 911.
La policía dijo en un comunicado de prensa anterior que la víctima, identificada como Wessels, parecía tener múltiples heridas de bala y cree que su muerte fue un homicidio. Hasta el martes por la noche no se habían realizado arrestos.
