Bogotá, Colombia – 12 de agosto de 2024 – El secuestro de alrededor de 100 soldados de la Fuerza de Tarea Conjunta Omega en San José del Guaviare, de los cuales 40 ya fueron liberados, ha generado una fuerte respuesta del gobierno colombiano, que considera este acto como una violación al cese bilateral del fuego. Este incidente, protagonizado por la guardia campesina y vinculado a las disidencias de las FARC, ha puesto en duda la continuidad del cese al fuego con el bloque Jorge Suárez Briceño, liderado por alias «Calarcá».
El ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, fue uno de los primeros en expresar su preocupación por la situación, calificando la retención de los soldados como un acto de secuestro. «Si no se liberan y se frena la extorsión generalizada de esa estructura armada ilegal a la población de Meta, Caquetá y Guaviare, hay que revisar la conveniencia de mantener un cese que no beneficia a los habitantes de la región», afirmó Cristo, sugiriendo que la situación podría llevar a la suspensión del cese al fuego si no se observa un compromiso real por parte del grupo armado.
El ministro de Defensa, Iván Velásquez, también se pronunció al respecto, cuestionando la continuidad del cese al fuego con este grupo ilegal. «La continuidad del secuestro de los soldados en San José del Guaviare obligará a replantear el cese al fuego con el bloque Jorge Suárez Briceño», escribió Velásquez en la red social X. Añadió que la prórroga del cese al fuego, vigente hasta el 15 de octubre, debe ser suspendida si no hay un compromiso claro de parte del grupo.
El incidente ha generado una oleada de críticas y preocupaciones tanto dentro del gobierno como en la opinión pública. El alcalde de San José del Guaviare, Willy Rodríguez, ha intentado calmar los ánimos, asegurando que la retención de los soldados no debe ser calificada como un secuestro, sino como una medida preventiva para evitar enfrentamientos. «Dado el cese al fuego y la presencia de algunos grupos al margen de la ley, la movilización del Ejército en esa zona puede generar un riesgo de enfrentamiento, por lo que la guardia campesina pidió que se reubicaran las unidades», explicó Rodríguez en Blu Radio.
Sin embargo, el comandante de las Fuerzas Militares, almirante Francisco Cubides, responsabilizó directamente a la estructura Jorge Suárez Briceño de la retención de los soldados, señalando que es un acto inaceptable que debe ser resuelto pacíficamente. Jaime Salamanca, presidente de la Cámara de Representantes, también criticó la situación, afirmando que el gobierno debe exigir una solución pacífica en la mesa de negociaciones y reconsiderar el cese al fuego bilateral con este grupo.
La Procuraduría General de la Nación, encabezada por Margarita Cabello, expresó su preocupación por el uso de vías de hecho por parte de las comunidades en la región y pidió que se respete la vida y la integridad de los soldados retenidos. Además, hizo un llamado al gobierno para que implemente de inmediato medidas de verificación del cese al fuego, para evitar que situaciones como esta se repitan.
