Como lo he reiterado varias veces, Colombia tendrá una oportunidad de oro este domingo 13 de marzo para renovar el Congreso. Las elecciones legislativas para elegir senadores y representantes a la cámara se presentan en una coyuntura muy especial.
La rama legislativa tiene mucho más poder que la ejecutiva. Es realmente en el Congreso donde se gobierna, donde se hacen las leyes, donde nuestros representantes deben velar por el pueblo que los elige. Son los senadores y representantes a la cámara quienes realmente ostentan el poder, incluso por encima del presidente de la república.
De nada le serviría a Colombia tener como presidente a un político alternativo y honesto si en el Congreso siguen gobernando los mismos de siempre. Un presidente con un Senado y una Cámara de Representantes en contra, haría muy poco. Por eso la importancia que tiene la Rama Legislativa representada por el Congreso de la República.
Colombia está hastiada de la corrupción ejercida por gran parte de los congresistas, por los representantes de esas casas políticas de familias entronadas en las regiones gracias a sus prácticas corruptas de compra de votos. La costa Atlántica es un ejemplo de ello. Está plagada de esas familias poderosas que llevan varias generaciones haciéndose elegir para perpetrar su hegemonía política. Los Gerlein, los Char, los Gnecco, los Vives, los Zucardi , los Barguil, los Cotes, los Jattin, los Tulena, los Acuña, los Amín, los Name, entre otros clanes. O qué tal los tenebrosos personajes que siguen mandando la parada a pesar de estar presos o de estar muertos políticamente debido a condenas por corrupción, asesinatos o complicidad con grupos paramilitares. Para mencionar sólo algunos caciques como Ñoño Elías, Besailes, Deluque, García Romero, Kiko Gómez. En el Valle del Cauca también se cuentan clanes como los creados por Dilian Francisca Toro y los Abadía. O en Santander con el clan Aguilar donde padre e hijo están presos. Y así, en todas las regiones del país la democracia lleva décadas presa del clientelismo y corrupción ejercidos por clanes, familias y caciques. Tampoco se quedan atrás ciertos partidos políticos que parecieran que muchos de sus candidatos debieran tener un prontuario delictivo para ser miembros de ellos, como es el caso del Centro Democrático, Cambio Radical u Opción Ciudadana. Ningún candidato salido de estos engendros se merece el voto de los colombianos.
Como decía anteriormente, tenemos una oportunidad única para renovar el Congreso de la república y elegir los representantes de la Rama Legislativa para que la democracia se recomponga y los colombianos tengamos una representatividad real en los senadores y representantes a la cámara. El Congreso está dominado por muchas de esas familias, clanes y caciques a quienes les ha interesado el poder sólo para el beneficio personal y enriquecerse gracias al robo y la corrupción que ejercen con contrataciones amañadas y otras tantas prácticas políticas podridas.
Si usted se ha sentido indignado alguna vez en su vida por la imagen negativa del Congreso y de sus representantes, este domingo 13 de marzo salga y proteste votando por opciones diferentes, por personas que quieren llegar al Congreso a ejercer la política de una manera distinta, justa, pensando en la gente, en alcanzar una justicia social y una mejor sociedad. Hay listas como la del Pacto Histórico con candidatos muy valiosos que han ejercido la política de una manera limpia y con sentido social. Es el caso de Gustavo Bolívar, Aída Avella, María José Pizarro, Wilson Arias o Iván Cepeda. O jóvenes promesas como Isabel Cristina Zuleta. O lideresas sociales y defensoras de derechos humanos como Gloria Flórez. El Pacto Histórico también tiene listas cerradas para Cámaras de Representantes en cada uno de los departamentos con personas valiosas que quieren llegar al Congreso para democratizarlo y hacer las leyes que el país necesita para trabajar por una justicia social que incluya bienestar económico, educación, justicia, empleo y oportunidades de diversas índoles.
Así como el Pacto Histórico hay también gente muy valiosa en el Partido Alianza Verde como Antonio Sanguino, Iván Marulanda, Angélica Lozano, Inti Asprilla y destacando muy especialmente a Ariel Ávila, quien se lanza por primera vez a la política. Salga a votar. Dele una oportunidad al país al elegir candidatos que marcan la diferencia. Recuerde que el poder real está en el Congreso. ¡A Votar!.