“Me dijeron que estaba al sol, justo ahí, al lado de Valencia. Así que dije ‘está bien, vamos'».
Los dos últimos partidos de Capoue para Watford fueron en la segunda división de Inglaterra contra Norwich y Huddersfield.
Se fue en enero de 2021 y sus dos últimos partidos de esa temporada con el Villarreal fueron ante Real Madrid y Manchester United. El Villarreal venció al United en los penaltis para ganar la final de la Europa League y Capoue fue nombrado mejor jugador del partido.
El Villarreal, el club del que Capoue no sabía nada, se medirá este martes al Liverpool en la ida de las semifinales de la Champions League. Un pequeño y tranquilo pueblo en la costa este de España ahora tiene una oportunidad de ser coronado rey de Europa.
“¿Ganar la Champions? Nunca tuvimos la audacia de decir que podíamos ganar la Champions League”, cuenta Capoue a la AFP entre risas.
“Somos el club más pequeño en las semifinales, fuimos el club más pequeño en los cuartos de final. Solo estamos haciendo nuestro camino feliz. Y no tenemos nada que perder”.
El Villarreal eliminó a la Juventus en octavos y al Bayern de Múnich en cuartos, dos clubes que en conjunto poseen el doble de Copas de Europa -ocho- que el Villarreal tiene victorias en octavos de final.
Cuando el Bayern ganaba su tercera Copa de Europa consecutiva en 1976, el Villarreal descendía a la cuarta división española.
Para algunos en Villarreal, la conversación sobre cuentos de hadas y matanzas de gigantes podría estar agotándose.
El Villarreal es un pueblo pequeño pero un gran club, el campeón de la Europa League, un equipo propiedad de un magnate de los supermercados, que ha terminado solo una de las últimas ocho temporadas fuera de los siete primeros de la Liga.
“No nos importa, sabemos que no somos favoritos”, dice Capoue.
“Nadie dirá que somos favoritos porque no lo somos. ¿Quiénes son los otros equipos? ¿Qué más podemos decir sobre ellos?
«No es ofender a nadie decir que hay 50.000 personas aquí y solo en sus estadios tienen 70.000 asientos. No nos importa, es la verdad».
– El ‘peor estadio’ de Anfield –
Liverpool volverá a dar un paso adelante, con el equipo de Jurgen Klopp todavía en la búsqueda de un cuádruple histórico.
Y en Anfield, el desafío es uno de los más feroces del fútbol, algo que Capoue conoce muy bien. Ha jugado cuatro veces allí, todas para Watford, y perdió por un marcador global de 18-1.
“Anfield es un infierno, hay que decirlo como es. Es un infierno”, dice Capoue.
“Es el peor estadio en el que he estado en Inglaterra. Ya sea el ambiente, la forma en que juegan… Durante 90 minutos, vives en el infierno.
“Tienen esta capacidad de trascenderse a sí mismos, de causarte nada más que problemas, todo el tiempo, en cualquier parte del campo.
“Nunca paran, te apuran todo el tiempo, solo quieren marcar goles, y aunque marcan, siguen. Quieren noquearte.
«No les importa qué o quién está frente a ellos. Solo quieren matar a todos y eso es todo».
Al menos es poco probable que Capoue se sienta intimidado. El centrocampista francés no es futbolero, evita ver fútbol en casa y dice “no quiero que el fútbol sea toda mi vida”.
En cambio, el técnico del Villarreal, Unai Emery, conocerá todos los detalles de su rival esta semana. La preparación meticulosa de Emery se extiende a sesiones de video famosamente largas, con el objetivo de preparar a sus jugadores para todos los escenarios posibles.
“Estoy en la primera fila, soy un buen estudiante”, dice Capoue con una sonrisa.
“No veo fútbol en absoluto, así que no me importa. Si los demás ven fútbol en casa y luego cuando entran tienen que ver más videos de fútbol, tal vez eso les moleste.
“No me molesta porque sé que no es por diversión, es por trabajo. Lo hace para darte la mayor información posible y al final, todas estas situaciones, en los partidos, se dan.
«Al final del partido, te dices a ti mismo, ‘sabes qué, el entrenador, es increíblemente inteligente’. Eso me pasa todo el tiempo».
Capoue no tiene dudas sobre la raíz de los problemas de Emery en el Paris Saint-Germain y el Arsenal.
“La forma principal de jugar del entrenador es dejar el ego a un lado”, dice Capoue. “Lo hacemos, y eso se nota en el campo, pero con los grandes equipos eso también volvió a morderlo”.
En Villarreal, es un método que los jugadores “siguen a ciegas”, dice Capoue, un enfoque que infunde confianza.
“Estamos en semifinales, lo que demuestra que no le teníamos miedo a la Juventus o al Bayern”, dice.
“No somos un gran equipo pero somos un equipo sólido, que juega por amor al fútbol, que quiere disfrutar este momento. Porque lo que estamos viviendo es increíble”.
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