El abuso y el sometimiento son dos situaciones que está relacionadas con algún tipo de violencia, por diversos motivos o circunstancias, ya sea en la familia, el trabajo o en una institución.
La mayoría de las personas que la ejercen, cuentan con una estructura mental perversa, puede ser una persona amable pero cuando se asoma la sed de goce somete a su víctima a la humillación, sufrimiento o la denigra.
Este placer no se encuentra en el goce de los genitales sino en el goce mental y esto hace que la situación se agrave, la víctima sufre daños físicos, traumas.
Estas situaciones ocurren en cualquier ámbito, el maltrato es una forma de violencia que conduce a ambas partes a caer una y otra vez, es el juego del fuerte contra el débil y la mayoría de las veces existe una dificultad enorme para cortar este vínculo vicioso.