Redacción
El Senado aprobó un proyecto de ley que permitirá a los equipos de fútbol convertirse en empresas e imponer penas contra quienes realicen disturbios en los estadios. La intención es acabar con la violencia y evitar vínculos con el narcotráfico
El proyecto ya contaba con la sanción de la Cámara de Diputados, con lo que sólo resta esperar la firma del presidente Juan Manuel Santos para que entre en vigor.
La norma también prevé establecer los derechos laborales de los jugadores en cuanto al pago de sus salarios y la seguridad social.
El ministro del Interior, Germán Vargas, advirtió que los conjuntos que incumplan con la legislación serán excluidos de los torneos y perderán el reconocimiento del Instituto Colombiano de Deportes, máxima autoridad del sector en el país sudamericano.
El Ejecutivo también pretende frenar los disturbios entre los fanáticos mediante la imputación de penas que van desde prohibir la entrada a los estadios a los revoltosos hasta sentenciar con 10 años de prisión a quienes usen explosivos en dichas instalaciones.
De esa manera respondería a la solicitud de la policía, que el lunes anterior urgió a redoblar las sanciones para los provocadores de desordenes en los partidos de fútbol.
Los más recientes incidentes de esa naturaleza dejaron tres heridos y 68 detenidos por portar armas en las ciudades de Neiva, Tulúa, Bucaramanga y Medellín el pasado fin de semana.