Redacción
La cefaléa y la migraña se consideras como iguales y en realidad no lo son, la cefaléa es una sensación muy dolorosa en la región supraorbitaria y en la zona cervical, cualquier afección en la cabeza derivará una cefaléa.
En la homeopatía no existen enfermedades sino enfermos, cuando existe un síntoma externo, lo que vemos es un desequilibrio de la fuerza vital, debemos tener en cuenta cuál es el lenguaje que maneja el individuo dentro de una extructura sintomática específica relacionada con todo su ser, solo así se logrará un tratamiento intensivo, a fondo.
Tenemos así dolores premenstruales, psíquicos, tensiones musculares, por estar fatigados, alimentarios, etc. En la homeopatía se estudia los síntomas mentales, el carácter de la persona, de donde proviene el dolor, la memoria, las reacciones que lo producen puede ser el frío, calor, sueño.
Existen varios tipos de migrañas, las personas muy sensibles al frío, cefaléa pulsátil, dolor martilleante, la cabeza le vibra y no desea ver la luz, las migrañas tipo clavos, en las sienes especialmente, la migraña por los trastornos de origen digestivo, vómitos, diarreas, dolor con inmovilidad, desea estar acostado y con presión en la zona de dolor, si se atiende este dolor se podrá desvelar el sufrimiento y tratar la migraña en todo su conjunto.