El presidente de Ecuador, Rafael Correa, aumentó los salarios para cuatro rangos de policías y militares entre 400 y 570 dólares, días después de una rebelión policial en rechazo a una ley que eliminó bonificaciones para la fuerza pública.
Los incrementos son parte de una homologación salarial que estaba pendiente desde 2008 y se aplicarán en forma retroactiva desde enero de este año, señaló el ministro de Defensa, Javier Ponce.
El funcionario negó que la medida esté vinculada a la insurrección del pasado jueves, que dejó 10 muertos y 274 heridos.
«El acuerdo ministerial se firmó el sábado, es lamentable que las fechas hayan coincidido, pero es un tema que estaba definido con anterioridad», dijo en rueda de prensa.