Redacción
Por Adonay Cárdenas, reportero de El País.
Dolor. Hoy, cuatro años después de la tragedia en Bendiciones, en la vía al Mar, el dolor sigue intacto al igual que las necesidades de quienes lograron salir ilesos de la avalancha.
Adonay Cárdenas / El País
Hoy, cuando se conmemoran cuatro años de la tragedia, no se han materializado las promesas de vivienda.
Una cruz enorme con una placa que no permite olvidar el nombre de las 32 víctimas de la avalancha en la vía al Mar fue lo único que se levantó en Bendiciones. Ni siquiera los que siguen con vida han logrado reincorporarse del todo.
Después de cuatro años, a muchos todavía les retumba los gritos de sus hijos, hermanos, padres, vecinos y amigos tratando de escapar de 70.000 metros cúbicos de lodo que bajaron de la cordillera occidental sepultando todo en la madrugada del Jueves Santo, hace cuatro años.
Al final de esa trágica mañana quedaron 38 muertos, 4 desaparecidos y 217 familias que perdieron hasta las ganas de vivir. Lo peor vino después, cuando un alud de promesas se volcó sobre las más de 700 personas que llegaron al casco urbano del Puerto en busca de ayudas. Hasta ahora ninguna se ha cristalizado.
“Nos han tenido engañados, ni siquiera se ha levantado una casa modelo”, dijo Jairo Angulo, uno de los afectados. El hombre sostiene que han tenido que aguantar muchas humillaciones. Y es que hace un año y medio se acabó el subsidio de alimentación ofrecido por el Gobierno.
“Afortunadamente apareció la minería de Zaragoza donde muchos de nosotros encontramos una forma de ganarnos algunos pesos para subsistir, pero lo grave es que quieren acabarla”, destacó Angulo.
Pidió que el Presidente Uribe se dé cuenta de lo que está pasando en ese corregimiento de Buenaventura. “De pronto a él lo han engañado diciéndole que las casas ya están construidas, cuando eso no es cierto”, sostuvo Henry Valencia, quien explicó que la comunidad no optó por la autoconstrucción porque la Administración Municipal proyectó la edificación de un plan de vivienda.
Al unísono, reclaman el cumplimiento de las promesas que se hicieron un día después de la avalancha en las instalaciones de la Sociedad Portuaria Regional de Buenaventura y luego en el Coliseo Cubierto. En diciembre pasado el desespero de la comunidad obligó a tomarse las gradas de acceso a la Alcaldía de Buenaventura, ahora piensan que como no fueron escuchados les tocará cerrar la vía.
La Universidad del Pacífico, la Alcaldía y la caja de compensación Comfandi hacen parte del proyecto de vivienda San Antonio o ‘Villa Chupeta’, como se conoce popularmente.
Lo que se ha hecho
A tres kilómetros de la zona del desastre, la Administración del ex alcalde Saulo Quiñones compró un terreno donde se comenzaron a hacer algunas obras de urbanismo con los $1.500 millones que aportó la Gobernación del entonces mandatario Angelino Garzón. Con ese dinero se hicieron las vías de acceso de la ‘Ciudadadela Nueva Esperanza’, así como las terrazas para 70 viviendas.
Germán Pasquel García, coordinador del proyecto, indicó que con la visita que hará esta semana Consuelo Barrera, representante del Fondo Nacional de Calamidades, se podría definir cuándo se desembolsarán los recursos para empezar a construir las primeras 70 casas.
Destacó que el alcalde José Félix Ocoró está expectante ante la respuesta que traerá la funcionaria nacional. En caso de ser negativa el Mandatario local dijo que iniciará por su cuenta el proyecto con los dineros de la contrapartida.
“Es imperante cumplir con estas personas que llevan mucho tiempo esperando pacientemente para regresar a la zona de donde salieron debido a la fuerza de la naturaleza”, puntualizó Pasquel. Para ello se cuenta con $450 millones de recursos del Municipio.
El sacerdote Jhon Reina, de la iglesia Catedral de Buenaventura, se mostró intranquilo por la demora de las obras y resaltó que desafortunadamente no se le cumplió a la gente, que en este momento vive en condiciones infrahumanas.
Lucila Martínez, representante legal del consejo Comunitario del corregimiento de Zaragoza, reconoció las gestiones de la Administración, pero dice que no hay nada concreto. “Sé que han estado haciendo gestiones, pero no hay ni una licitación andando, es muy triste ver como han tratado a los damnificados que lo perdieron todo”.
‘Villa Chupeta’ será una realidad
Este año estarían listas 568 viviendas de las 3.400 planeadas en Villa ‘Chupeta’, como le conocen popularmente al proyecto San Antonio, que se levantará con el dinero de las caletas encontradas al narcotraficante Juan Carlos Ramírez Abadía y que beneficiarán a los damnificados de Bendiciones.
“Esperamos que antes de finalizar el año estén terminadas estas casas. Se han superado algunas dificultades, pero el proyecto está andando”, dijo María del Mar Vidal, articuladora del Centro de Coordinación de Acción Integral de la Presidencia de la República.
Las viviendas, cuyas casas modelo están frente a la Universidad del Pacífico en la antigua Vía al Mar, son de dos niveles y se edificarán en el estero San Antonio.
La demanda
En los estrados judiciales avanza una millonaria demanda en contra del Estado, el Departamento, la CVC, Invías, el Municipio y otras nueve entidades, por la responsabilidad en la falla del servicio en la gestión del riesgo ambiental y de la prevención, reducción y mitigación de los efectos del desastre natural del 12 de abril del 2006.
El proceso es liderado por el abogado Eusebio Camacho, quien ha obtenido resultados positivos para sus clientes en más de cien demandas adelantadas contra la Nación. Tomado de EL País.