La reforma de la salud es uno de los proyectos más importantes del gobierno de Gustavo Petro. La iniciativa ya pasó su primer debate en el Congreso, aunque no ha dejado de ser blanco de críticas y desaprobaciones por parte de diferentes sectores.
Uno de los pilares del articulado es la promoción de la APS o Atención Primaria en Salud. En ese sentido, el presidente Petro volvió a defender la propuesta usando un estudio publicado en la revista The Lancet sobre la APS.
(Vea: Rápido avance de la reforma de la salud desata nuevas críticas).
«La revista The Lancet vuelve a decirnos que la Atención Primaria en Salud es la piedra angular de un modelo de salud capaz de afrontar las pandemias. Es exactamente lo que propone la reforma de salud de nuestro gobierno«, aseguró Petro en su cuenta de Twitter.
Pero, ¿de qué habla, puntualmente, la investigación que citó el mandatario en la red social? Le contamos.
El estudio fue realizado por Arush Lal, miembro de la Comisión de Salud Universal de Chatham House y representante de la comunidad y la sociedad civil para el Acelerador de Acceso a Herramientas covi-19 (ACT), y Nina Schwalbe, investigadora de salud pública estadounidense y la fundadora de Spark Street Advisors, un grupo de expertos en salud pública con sede en la ciudad de Nueva York.
La investigación, que se titula ‘Atención Primaria de Salud: piedra angular de la prevención, preparación, respuesta y recuperación ante pandemias’, se publicó el 19 de mayo en The Lancet, una revista médica general que es líder a nivel mundial en el sector.
La investigación evidencia la importancia de que los gobiernos implementen políticas basadas en la atención primaria de salud (APS), pues luego de la crisis de la COVID-19 «más del 90% de los países informaron un retroceso generalizado de los servicios de salud«.
(Vea: Reforma de la salud: se aprobó el proyecto en primer debate).
Sobre los beneficios de la APS, se asegura que «genera confianza en los trabajadores e instalaciones de salud locales, lo que ayuda a combatir la información errónea y la desinformación y fortalece la resiliencia de la comunidad«. Además, «los sistemas integrales de APS también pueden reutilizarse rápidamente para distribuir contramedidas de emergencia junto con los servicios y tratamientos de salud esenciales, maximizando así los recursos y evitando el colapso del sistema de salud«.
Otra ventaja, según el estudio, es que «la APS puede acelerar la recuperación social y económica al conectar a las comunidades con programas de apoyo nutricional, de vivienda y financiero«.
(Vea: Puntos cruciales de la reforma a la salud aprobada en primer debate).
Lal y Schwalbe también enfatizan en la necesidad de «integrar de la vigilancia de emergencia con los datos de salud de rutina a nivel de atención primaria de la salud«, pues esto, agregan, contribuiría a identificar rápidamente los puntos críticos de enfermedades e informar los esfuerzos futuros de investigación y desarrollo.
Reforma de la salud.
Además, revelan una ruta para implementar la APS:
1. Invertir en APS para mantener a las personas saludables.
2. Establecer planes de contingencia impulsados por la comunidad para brindar atención primaria de salud en todas las etapas de una crisis. El objetivo es que se asegure a los trabajadores de la salud y los servicios de salud esenciales, para que sigan siendo accesibles y asequibles y puedan usarse para la atención de recuperación.
3. Aprovechar la APS como punto de coordinación para la integración de la PPR y la cobertura universal de salud.
(Vea: Reforma de la salud, a 22 artículos de pasar su primera prueba).
Lal y Schwalbe concluyen que es necesario que «los formuladores de políticas desarrollen planes de contingencia a prueba de fallas para la APS para ayudar a las comunidades a prepararse mejor, responder y recuperarse de las amenazas de enfermedades infecciosas«.
El estudio se realizó con base a una encuesta realizada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) en 2020 y datos de la Revista Médica Británica.
Vea el informe completo aquí.
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