Redacción
El ministro de inmigración de Australia dijo el jueves que intervino «personalmente» en una decisión de visa que abre la puerta para que Novak Djokovic juegue en el próximo torneo de tenis Grand Slam del país.
El ex número uno del mundo fue expulsado del país en el período previo al Abierto de Australia a principios de este año después de negarse a ser vacunado contra el covid-19.
Pero con una disminución significativa en las restricciones pandémicas desde entonces, el ministro de Inmigración, Andrew Giles, dijo que el serbio no vacunado ahora podía regresar.
«Desde la cancelación de la visa del señor Djokovic en enero de 2022, se eliminaron todas las restricciones fronterizas australianas relacionadas con el COVID-19, incluido el requisito de proporcionar evidencia del estado de vacunación contra el COVID-19 para ingresar a Australia», dijo en un comunicado. .
«Al señor Djokovic se le otorgó posteriormente una visa temporal para ingresar a Australia».
El gobierno conservador anterior de Australia prohibió a Djokovic, uno de los mejores tenistas masculinos de su generación, regresar a Australia hasta 2025.
Giles dijo que, como ministro de inmigración del país, él era la única persona con el poder de revocar esa prohibición.
«El poder… sólo puede ser ejercido por el ministro personalmente», dijo.
Djokovic, quien ha ganado el Abierto de Australia nueve veces, confirmó por primera vez la decisión de la visa después de vencer a Andrey Rublev en las finales de la ATP en Turín el miércoles.
«Me alegró mucho recibir la noticia ayer. Fue un alivio», dijo a los periodistas.
«Obviamente fue un alivio saber por lo que yo y las personas más cercanas a mí en mi vida hemos pasado este año con lo que sucedió en Australia y después de Australia, obviamente».
Djokovic llegó a Melbourne en enero para el primer Grand Slam del año, alegando que había obtenido una exención médica para ingresar al país sin estar vacunado, ya que se había recuperado recientemente de Covid-19.
Pero los funcionarios fronterizos australianos dijeron que no cumplía con los requisitos para estar exento de las estrictas reglas de vacunación, y su visa fue cancelada luego del colapso de una apelación legal prolongada.
El exministro conservador de Inmigración, Alex Hawke, dijo en ese momento que Djokovic era «percibido por algunos como un talismán» del sentimiento antivacunas, y que su presencia en el país podría provocar «disturbios civiles».
La saga legal de Djokovic se desarrolló en un contexto de protestas continuas contra la vacunación en las principales ciudades de Australia.
Desde entonces, Australia eliminó el requisito de que los visitantes muestren prueba de vacunación contra Covid.
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