El peleador de 26 años hizo su debut en las 205 libras el sábado en la cartelera principal de UFC Fight Night 200. Allen (18-5 MMA, 6-2 UFC) tomó la pelea con poca anticipación y sometió a Sam Alvey, enviando a Alvey a 0 -7-1 sus últimas ocho peleas.
Originalmente, Alvey estaba programado para pelear contra Ian Heinisch en el peso mediano, pero luego se le dio a Allen después de que las lesiones obligaron a Heinisch y al reemplazo Phil Hawes a retirarse del evento.
A pesar de lograr una victoria en una nueva categoría de peso, Allen no tiene interés en permanecer en el peso semipesado y planea continuar su carrera en UFC en las 185 libras.
«Simplemente voy a mantener mis asuntos pendientes en 185 (libras)», dijo Allen a los periodistas en la conferencia de prensa posterior a la pelea de UFC Fight Night 200. “Todavía tengo trabajo por hacer en 185. Tengo al mejor mánager del juego, Ali (Abdelaziz) y Dominance MMA, así que voy a dejar que él se haga cargo. Siempre que él diga ve, ahí es donde iré. Pero en 2022, los tiradores disparan, y yo estoy disparando”.
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Allen dijo que Alvey no tenía sorpresas para él y que sabía qué esperar del veterano peleador de UFC.
“Sabía lo que iba a lanzar”, dijo Allen. “Solo tenía que conseguir ese momento. Realmente no he estado haciendo nada, para ser honesto. Mi gerencia realmente no quería que tomara la pelea por eso. Yo tenía otras cosas en marcha. Sabíamos con lo que iba a venir. Es un verdadero veterano. No tengo nada más que respeto”.
