Al menos 11 soldados han muerto y 50 civiles han desaparecido después de que combatientes armados atacaran un convoy militar.
El convoy de 150 vehículos con escolta militar llevaba suministros a una ciudad del norte.
En un comunicado, el gobierno dijo que el asalto tuvo lugar en la comuna de Gaskinde en la provincia de Soum, donde grupos armados vinculados a al-Qaeda y el grupo ISIL (ISIS) han estado escalando ataques y tomando territorio desde 2015.
Dijo que los soldados resultaron heridos, mientras que decenas de camiones fueron destruidos.
La violencia se ha desatado en Burkina Faso desde que el teniente coronel Paul-Henri Sandaogo Damiba tomó el poder en un golpe de estado en enero, derrocando al líder electo del país de África Occidental y prometiendo controlar a los grupos armados.
Al igual que en los países vecinos, los combatientes afiliados a al-Qaeda e ISIL (ISIS) han avivado los disturbios, incluso después de que Damiba a principios de este mes destituyera a su ministro de defensa y asumiera el cargo él mismo.
En la provincia norteña de Soum, los grupos armados han bloqueado varias áreas, por lo que los convoyes del gobierno y los lanzamientos desde el aire han entregado artículos esenciales a los civiles atrapados.
Lionel Bilgo, vocero del gobierno, calificó el ataque de “cobarde y bárbaro”.
“La cifra provisional es que se han encontrado 11 cuerpos de militares”, dijo. “Alrededor de 50 civiles están desaparecidos y las búsquedas están en curso”.
Una fuente de seguridad le dijo a la agencia de noticias AFP que el número de muertos podría llegar a 60.
“Prácticamente se quemó todo el convoy”, dijo una fuente a la agencia.
Un video compartido en línea mostró a personas luchando para recuperar bienes de al menos una docena de camiones en llamas y una columna de humo que se extendía por los matorrales.
Otro video mostraba multitudes dando la bienvenida a los vehículos del convoy que sobrevivió al ataque y llegó a la ciudad de Djibo.