En resumen
- El gobierno de Burkina Faso lamentó la deportación de 164 ciudadanos de Costa de Marfil en medio de los esfuerzos en curso para alojar a los refugiados.
- Un grupo de 173 burkineses llegó a Costa de Marfil, pero 164 fueron deportados sin explicaciones.
- Fuentes locales sugieren que las deportaciones se debieron a la falta de registro y a preocupaciones por la seguridad.
- El gobierno marfileño califica la deportación de medida aislada y reafirma su compromiso de ayudar a los solicitantes de asilo.
Uagadugú, Burkina Faso – El gobierno burkinés ha expresado su pesar por la deportación de 164 de sus ciudadanos, que recientemente buscaron refugio en Costa de Marfil. Esto se produce en medio de los esfuerzos en curso para acoger a los 60.000 burkineses que han huido de la inestabilidad en su país de origen desde 2021. Muchos de estos refugiados están acogidos por familias locales, mientras que otros están alojados en centros de recepción establecidos por el gobierno.
El 13 de julio de 2024, un grupo de 173 burkineses, en su mayoría mujeres, niños y unos cincuenta hombres, llegó a Ouangolodougou (Costa de Marfil). Siete miembros del grupo se presentaron ante las autoridades locales para registrar su ganado. Sin embargo, tres días después, 164 de los refugiados fueron deportados a Burkina Faso sin ninguna explicación oficial.
Fuentes locales sugieren que las deportaciones se debieron a que los refugiados no se registraron ante las autoridades y a la preocupación por posibles flujos migratorios e infiltraciones de seguridad.
El Gobierno de Costa de Marfil califica la deportación de “medida aislada”
El portavoz del Gobierno burkinés, Jean Emmanuel Ouédraogo, condenó las deportaciones como una violación de los principios humanitarios durante una reunión del Consejo de Ministros celebrada el miércoles. En respuesta, el Ministro de Acción Humanitaria de Burkina Faso se desplazó a Niangoloko para brindar apoyo y suministros a las personas afectadas.
El gobierno de Costa de Marfil insiste en que la deportación fue un incidente aislado y reafirmó su compromiso permanente de ayudar a los solicitantes de asilo, una práctica que mantiene desde hace casi tres años.