Las autoridades anunciaron que se encuentran trabajando para lograr la pronta ejecución de un plan, a corto plazo, con el que se busca mejorar la capacidad de la infraestructura del aeropuerto El Dorado y descongestionar la terminal parcialmente.
(Pruebas para volar más en El Dorado iniciarían en un mes).
La estrategia está dividida en cuatro intervenciones. La primera es el traslado de los tanques de combustible ubicados en uno de los costados del aeropuerto, seguida de la ampliación del puente aéreo en posiciones para parqueo de aeronave; la posibilidad de tener nuevos puestos en la zona de carga y de mantenimiento; y la demolición de los hangares de revisión de Avianca, que están ubicados al oriente de la terminal y que condensan un área cercana a los 15.500 metros cuadrados.
“Las operaciones en el aeropuerto El Dorado han crecido como lo ha hecho la industria de la aviación en el mundo, hoy como sector estamos adelantando un plan que permita ampliar la capacidad de la terminal número uno del país, sin generar traumatismos en los tránsitos y previendo que se asegure el funcionamiento adecuado, sin retrasos y con los estándares más altos de calidad en el servicio”, aseguró Louis Kleyn, presidente de la ANI.
El traslado de tres tanques de combustible para aviación Jet A1, que actualmente se ubican en la zona sur del aeropuerto, a un predio localizado en el costado occidental de Fontibón, permitirá, entre otros beneficios, extender la terminal nacional hacia el oriente, con más plataforma, posiciones y puentes de abordaje (puertas de embarque); aumentar las reservas del combustible, eliminando el suministro por carrotanques y descongestionando las vías de acceso al aeropuerto.
(IATA y aerolíneas piden revisar la capacidad real de El Dorado).
Otra de las obras proyectadas consiste en la construcción de más área de plataforma cerca al puente aéreo y el terminal principal, con el fin de aumentar el número de posiciones para aeronaves. También se estudia la posibilidad de ampliar la plataforma del terminal de carga y zona de mantenimiento, donde se pueden construir más posiciones remotas para la pernocta de las aeronaves.
Cabe señalar que estas ampliaciones no implican extender el contrato de concesión actual con Opain, y permitirían pasar de 91 a 115 puestos de parqueo de aviones para poder operar 90 operaciones por hora, mientras que actualmente se autorizan 74, estando al máximo de la capacidad. Lo anterior ocasiona que, por cualquier circunstancia adversa, se generen retrasos en cadena.
Según las autoridades, para el desarrollo de estas obras se cuenta con un excedente de patrimonio autónomo del proyecto de concesión actual, cercano a los $115.000 millones, y se proyecta que con el Plan de Desarrollo y en conjunto con la Aerocivil, se puedan explorar otras fuentes de financiación para lograr una partida cercana a los $290.000 millones.
Es importante destacar que actualmente, la nueva flota de aeronaves que operan en El Dorado, y que incorpora nuevas tecnologías y turbinas con menores índices de ruido, realizan aterrizajes en sentido contrario en la pista sur, lo que ha permitido ampliar las operaciones dos horas, iniciando a las 5 a.m. y finalizando hacia la medianoche, lo que mejora notablemente los tiempos para despegues y aterrizajes de las frecuencias actuales.