El presidente de Colombia, Gustavo Petro, ha ordenado la suspensión de las exportaciones de carbón a Israel, alegando que esta medida se mantendrá vigente hasta que Tel Aviv detenga lo que ha calificado como «genocidio». La decisión se anunció el pasado sábado a través de la cuenta oficial del mandatario en la red social X.
Esta decisión se suma a una serie de acciones previas por parte del gobierno de Petro que han tensado las relaciones entre Colombia e Israel. El punto más crítico en estas relaciones se alcanzó en mayo pasado, cuando Bogotá rompió nexos diplomáticos en respuesta a la ofensiva militar israelí sobre la ciudad de Rafáh.
El presidente Petro había ordenado anteriormente la suspensión de las compras de equipos militares a Israel, una nación que ha sido uno de los principales proveedores de armamento para la Policía y las Fuerzas Militares de Colombia.
La suspensión de las exportaciones de carbón está respaldada por un proyecto de decreto emitido por el Ministerio de Comercio, Industria y Turismo, el cual establece un período para comentarios antes de ser firmado por el presidente. Esta medida marca una escalada significativa en las acciones del gobierno colombiano contra Israel, con implicaciones importantes tanto diplomáticas como económicas.
La Asociación Colombiana de Minería (ACM) expresó su preocupación por el impacto económico y social de esta decisión. Israel es un importante socio comercial en el sector del carbón térmico, y las exportaciones a ese país representan ingresos significativos para Colombia.
En un comunicado, la ACM señaló: “Este tipo de medidas debe sopesar las implicaciones económicas y sociales para el país y las regiones. Israel es un destino clave para las exportaciones de carbón térmico de Colombia, representa en impuestos, regalías y contribuciones $650 mil millones cada año, de los cuales más de $100 mil millones van directamente a las regiones de La Guajira y el Cesar”.
La decisión del gobierno colombiano tiene el potencial de afectar notablemente a las regiones productoras de carbón, como La Guajira y el Cesar, que dependen en gran medida de los ingresos provenientes de estas exportaciones. Los recursos generados por la venta de carbón a Israel no solo contribuyen al presupuesto nacional, sino que también financian proyectos y servicios vitales en estas comunidades.
El anuncio de la suspensión de las exportaciones coincidió con un nuevo ataque militar israelí en Gaza, donde se reportaron 150 víctimas mortales y el rescate de cuatro rehenes por parte de las tropas israelíes. Estos eventos han incrementado la atención internacional sobre el conflicto y las respuestas diplomáticas de diferentes países.
La orden del presidente Gustavo Petro de suspender las exportaciones de carbón a Israel representa un movimiento significativo en la política exterior de Colombia, con profundas repercusiones económicas y diplomáticas. La medida refleja el posicionamiento del gobierno frente a la situación en Gaza y subraya la necesidad de evaluar las consecuencias a nivel nacional y regional.