Durante la pandemia de COVID-19, la propiedad de mascotas en Singapur aumentó cuando los residentes recurrieron al mejor amigo del hombre en busca de consuelo y compañía. Desde 2019 hasta la primera mitad de 2022, el número de perros autorizados por Animal & Veterinary Service (AVS) aumentó un 20 %, de 70 000 a 84 000.
En consonancia con eso, los precios de los cachorros de raza pura aumentaron exponencialmente, con algunos anuncios que promocionaban cachorros por hasta 20 000 dólares singapurenses.
Desafortunadamente, a medida que los dueños regresaron a la oficina y a sus vidas después de la pandemia, esta explosión en la propiedad de mascotas también provocó el abandono de más animales. La AVS investigó 310 casos de abandono de mascotas el año pasado, frente a 225 en 2021, 251 en 2020 y 230 en 2019.
Las estadísticas sobre el abandono de perros no están fácilmente disponibles, pero este es un problema que no solo plantea preocupaciones sobre el bienestar animal, sino que también puede tener consecuencias para la salud y la seguridad públicas. Por causas ajenas a ellos, los perros que son abandonados pueden contraer enfermedades debido a las duras condiciones de vida en las calles, o volverse agresivos por el miedo y el hambre.
¿POR QUÉ LA GENTE COMPRA EN LUGAR DE ADOPTAR?
La razón más común por la que los aspirantes a dueños de mascotas compran en lugar de adoptar es porque quieren un cachorro, y lo quieren ahora. Quieren una transacción rápida y no quieren someterse al proceso de adopción, que muchos dicen que es demasiado largo.
Esto es desafortunado porque hay miles de perros, incluidos cachorros, esperando ser adoptados en Singapur. La razón clave por la que los grupos de bienestar animal hacen que las personas pasen por un proceso de adopción es para determinar que el perro será cuidado durante toda su vida y que el perro es adecuado para su familia adoptiva.
