Redacción
EL TRABAJO A DISTANCIA UNA ESPADA DE DOBLE FILO
Esta experiencia no es exclusiva de Singapur. Los empleados a los que se les otorgan arreglos de trabajo flexibles generalmente tienen más probabilidades de trabajar más horas.
En una encuesta de empleados de Los Ángeles realizada por Robert Half, el 68 % de los profesionales que trabajaron de forma remota durante la pandemia informaron que trabajaban los fines de semana, y el 45 % trabajaba más horas durante la semana que antes de la pandemia.
Parte del problema se deriva del hecho de que el trabajo remoto es, en última instancia, un arma de doble filo. Si bien brinda a los empleados una mayor flexibilidad y control sobre sus vidas, también dificulta la desconexión. Esto a menudo da como resultado que los empleados inevitablemente trabajen más horas para seguir el ritmo de sus colegas y apoyar el negocio.
En consecuencia, los empleados votan cada vez más con los pies en busca de una carrera más sostenible. En su Encuesta de Actitudes de Beneficios Globales de 2022, Willis Towers Watson informó que más de la mitad de los empleados encuestados en los EE. UU. estaban buscando activamente nuevas oportunidades o estaban “en riesgo” de irse. No es de extrañar que los empleadores estén preocupados.
Para detener la marea de la Gran Renuncia, las empresas han recurrido a implementar una serie de incentivos para los empleados. Estos tienden a ser de naturaleza financiera y van desde aumentos salariales absolutos hasta pagos de bonificación y planes de opciones sobre acciones para empleados.
Esto es consistente con los hallazgos de la Encuesta de Remuneración Total 2022 de Mercer: las empresas de Singapur han recurrido a incrementos promocionales más altos de hasta el 9,6 por ciento, así como bonos de retención, para atraer y retener talento.
Si bien la lógica detrás de tal movimiento parece sólida (es más probable que los empleados se queden si están bien remunerados), existe un consenso cada vez mayor entre los expertos superiores en recursos humanos de que esta es en realidad la respuesta incorrecta.
