En la sección ‘Así se hace’, el presidente de esta entidad hizo grandes anuncios.
Aunque con las ampliaciones en marcha la capacidad de sus puertos llegará a casi 11 millones de toneladas en 2020, la compañía Compas, operadora de terminales portuarias, ya proyecta las inversiones para una nueva fase de crecimiento.
El presidente de la empresa, Andrés Osorio Barrera, señaló que para los próximos 10 años se planean otros 250 millones de dólares de inversión, a fin de duplicar dicho volumen.
¿Cómo cierra el año en el volumen de carga movilizado?
Compas es la única red de puertos multipropósito de Colombia. Tenemos dos terminales en Buenaventura, un terminal en Tolú (Sucre), uno en Cartagena y uno en Barranquilla. En 2018 movilizamos 6,7 millones de toneladas y este año esperamos terminar en cerca de 7 millones. El 26 por ciento de los granos alimenticios que llegan al país entran por puertos de propiedad de Compas, y por ellos sale el 16 por ciento de todo el carbón que se exporta. Del acero que llega a Colombia, el 25 por ciento entra por nuestra operación.
¿Cómo lograrán el crecimiento de 14 % previsto para 2020?
Buena parte de este crecimiento está enfocado en Barranquilla, un proyecto que ejecutamos este año y que comenzamos a operar. Otra gran parte está en Tolú, con la ampliación, la cual estará a disposición del mercado terminando el primer trimestre del 2020.
El 26 por ciento de los granos alimenticios que llegan al país entran por puertos de propiedad de Compas
¿De cuánto será la inversión en esto?
En Tolú fueron cerca de 40 millones de dólares, lo que complementa una inversión que hicimos en Barranquilla el año pasado y que se terminó este año, cercana a los 28 millones de dólares. En los últimos cinco años hemos invertido cerca de 250 millones de dólares en desarrollos portuarios.
¿Cuánto ha subido la capacidad de los puertos?
Consideramos que el movimiento del próximo año va a llegar a los 8 millones de toneladas. Con las ampliaciones que estamos haciendo deberíamos estar con una capacidad de entre 10 y 11 millones de toneladas. Esperamos, en los próximos años, que podamos invertir otros 250 millones de dólares, lo que nos permitiría duplicar el movimiento de carga en los próximos 10 años. Estimamos que la capacidad instalada sea de 15 millones de toneladas.
¿Tienen en el radar proyectos fluviales?
Le apostamos al multimodalismo y vemos que a través del puerto en Barranquilla y también desde el de Cartagena, utilizando el canal del Dique, vamos a estar promoviendo el uso de barcazas y las líneas férreas para desarrollar más el comercio exterior. Con la inversión anunciada de la APP del río Magdalena vemos el tema con positivismo. Es una oportunidad, porque hoy los costos logísticos son bastante altos.
Con la construcción de las vías 4G, uno de los mercados objetivo es el paisa, pues es un mercado de importación
¿Qué beneficios habrá para la región, y en costos logísticos, con el puerto de Tolú?
Hay una oportunidad de desarrollo y de empleo para la gente de Tolú, Sucre y Córdoba. Además, estamos cerca de Medellín. Con la construcción de las vías 4G, uno de los mercados objetivo es el paisa, pues es un mercado de importación. Con la construcción del puente de Yati (Magangué, Bolívar) estaremos más cerca de Bogotá que los puertos tradicionales.
En Tolú estamos 100 kilómetros más cerca de Bogotá y de Boyacá, y equidistantes de los Santanderes. Internacionalmente, un kilómetro de recorrido en camión puede ser de hasta dos y tres dólares. Si son 100 kilómetros son hasta 300 dólares en ahorro por la distancia.
¿Esta expansión va en contravía de la operación en Buenaventura?
La mayor parte de la inversión de Compas ha sido en el Pacífico. En Aguadulce fueron 120 millones de dólares, es nuestro puerto más importante y tiene un mercado propio. El carbón de exportación va para Asia y los granos alimenticios que llegan van para el suroccidente, particularmente a Cali. No hay un puerto en el Atlántico que pueda suplir lo de Buenaventura. Y tenemos expectativas de invertir unos 50 millones de dólares en los próximos cinco años.
REDACCIÓN ECONOMÍA Y NEGOCIOS EL TIEMPO