Más de 900 personas de la comunidad Wayuu del municipio de Uribia, recibieron información, atención y asesoría sobre la protección de los Derechos Sexuales y Reproductivos, por parte de Profamilia y la Comisión de Mujeres Refugiadas – WRC.
Esta asesoría para que estas personas tengan un mayor conocimiento sobre la Educación Integral para la Sexualidad y conocimiento de los Derechos Sexuales y Reproductivos en comunidades vulnerables y territorios apartados del país genera riesgos, tales como la presencia de violencias basadas en género y violencia sexual.
De acuerdo con el informe del Observatorio de Violencia Contra La Mujer, en 2020 se presentaron 114 casos de violencia de pareja, presunto delito sexual y violencia interpersonal contra mujeres indígenas en La Guajira, siendo Riohacha, Maicao, Barrancas y Uribia los municipios más afectados. Además, esta situación se agudiza por la alta presencia de personas migrantes, al ser Uribia un corredor fronterizo, quienes son propensas a ser víctimas de violencia.
“Desde Profamilia creemos en el poder del cambio desde las comunidades, por eso, junto a WRC formamos líderes y lideresas en la identificación y atención de casos de violencia sexual y de género, para que puedan replicar los conocimientos adquiridos y aportar al cuidado y desarrollo de su comunidad. Contamos principalmente con personas de la comunidad Wayuu, pero también con población migrante flotante que se ha capacitado y esperamos que se conviertan en replicadores de información sobre la importancia de proteger y facilitar herramientas para que todas las personas puedan gozar sus Derechos Sexuales y Reproductivos sin violencia” aseguró Diana Moreno, directora de Incidencia de Profamilia Colombia.
En el marco del proyecto, 26 personas obtuvieron el título de ‘Trabajadores Comunitarios en Salud’ al recibir 120 horas de capacitación sobre herramientas innovadoras y canales de atención en temas relacionados con violencias de género. Según el modelo de trabajo del proyecto, estas personas podrán atender, guiar y amplificar la información para que cada vez más personas reconozcan sus Derechos Sexuales y Reproductivos y puedan ejercer su autonomía reproductiva libre de violencias.
“Este proyecto es muy importante porque ha llegado a la comunidad, porque en esta comunidad hay muchos espacios de violencias, como física, matrimonial, económica y hasta infantil. Y esto nos enseña que debemos ayudar a aquellas personas que son las víctimas” mencionó Israel Pushaina, integrante de la comunidad Villa Fausta.
De esta manera, Profamilia, la IPS más grande especializada en salud sexual y reproductiva, reafirma su compromiso de brindar mayor acceso a estos servicios a las comunidades más alejadas del territorio nacional, acompañado de información sobre rutas de atención, con el fin de contribuir al goce de los Derechos Sexuales y Reproductivos libres de discriminación y violencia.
