Las autoridades de Tuluá han indicado, al igual que en julio, que el asesinato del joven de 22 años no tuvo relación con las protestas y la huelga que se produjo hace unos meses.
«El asesinato del joven fue cometido cobardemente por un grupo delictivo que opera en el barrio de la colonia San Francisco y que ya ha sido desmantelado por la policía», dijo el alcalde.
Asimismo, agregó que «los celulares ahora son totalmente seguros que no tiene nada que ver con las protestas de abril y mayo pasados».
En ese momento, se habían filtrado diferentes suposiciones sobre lo que podría sucederle, quién estaría detrás y las razones.
Como confirmaron las autoridades en ese momento, el joven no pertenecía a la llamada ‘Primera Línea’.
El descubrimiento
El pasado sábado 19 de junio, en un jardín delantero cercano a su casa, quedó fuera el chef de Santiago Ochoa. Estaba en bolsas de plástico.
Fue así como sus familiares descubrieron que había sido víctima de un cruel homicidio.
Desde la mañana que el joven salió en su bicicleta, no han tenido ningún contacto con él. Sin embargo, no se hizo ningún informe de personas desaparecidas.
En la localidad de Aguaclara.
Una zona en la que no había habido manifestaciones, enfrentamientos, enfrentamientos ni presencia del Esmad durante días.
No hubo denuncia ni evidencia en fotos, videos o denuncias ciudadanas que indiquen que miembros de la policía se encontraban en la zona; como se suponía en su momento por la completa situación que se había presentado en la región y el resto del país en relación con la huelga.
Muchos ciudadanos incluso han pedido la liberación de videos de pruebas en los que se pueda establecer que la brigada antidisturbios se llevó al joven.
Como aseguraron en su momento varios políticos a través de las redes sociales.