DISuadir las crecientes amenazas del norte
Si bien Shin cree que una guerra a gran escala puede no ser inminente, dijo que Corea del Sur está preparada para las provocaciones o los intentos de infiltración del Norte.
El país, junto con Estados Unidos, está estudiando medidas ofensivas en respuesta a la evolución de las amenazas.
El mes pasado, funcionarios clave de operaciones especiales de Corea del Sur y Estados Unidos se reunieron para explorar formas de mejorar las capacidades de guerra especial.
Discutieron el empleo de capacidades de operaciones especiales de manera más ofensiva que defensiva, compartir doctrinas operativas y mejorar la interoperabilidad de los sistemas de armas, dijo Shin, quien fue el anfitrión de la inusual reunión.
Ambos países también hablaron sobre cómo aceptar la tecnología de la Cuarta Revolución Industrial, incluida la inteligencia artificial, y mejorar las futuras capacidades operativas especiales.
Estas medidas podrían aplicarse a los ejercicios militares conjuntos entre Seúl y Washington este verano.
“El marco general permanece sin cambios. Sin embargo, el contenido de este marco se ha ajustado para centrarse en las crecientes amenazas nucleares y de misiles de Corea del Norte”, afirmó Shin.
“Además, se han incorporado a los ejercicios formas recientes de guerra, como la guerra híbrida, la guerra cognitiva y las provocaciones en la zona gris. Esto incluye no sólo los ejercicios militares conjuntos sino también los ejercicios gubernamentales, lo que marca una diferencia significativa”.
Sobre su estrecha cooperación con Estados Unidos, Shin dijo que Corea del Sur paga alrededor de 2.700 millones de dólares al año para apoyar a las tropas estadounidenses estacionadas en el país.