Redacción BL
El pasado lunes 18 de febrero, jardines infantiles privados, de educación preescolar regresaron a clases bajo el esquema de alternancia.
Sin embargo, siguen polémica y dudas entre padres y estudiantes de colegios públicos sobre los riesgos de retornar a clases de manera presencial bajo protocolos de bioseguridad, que contrastan con la decisión de estos jardines de volver a las aulas.
Ante esto, la Secretaría de Educación de Cali y asociaciones de estos centros educativos, ha resultado positivo.
El secretario de Educación, William Rodríguez, indicó que desde que se inició el proceso de alternancia, el pasado 28 de septiembre del 2020 con colegios del calendario B, a la fecha cuentan con 152 establecimientos educativos, de los cuales 41 son de nivel preescolar, es decir, jardines infantiles.
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“A la fecha de hoy, el balance es más que positivo, teniendo en cuenta que no hemos tenido casos de infectados en institución o establecimiento educativo, pero además en términos de la aplicación de todos los protocolos y el fortalecimiento de todos los procesos pedagógicos, el balance que entregan los establecimientos educativos privados es bastante positivo, dado que nuestros estudiantes estaban reclamando el encuentro presencial”, anota el funcionario.
El titular de la cartera de Educación Distrital agrega que su dependencia ha acompañado este proceso en su labor de inspección y vigilancia, a través de “un diálogo permanente, en compañía de la Secretaría de Salud para estar haciendo los monitoreos pertinentes para garantizar el derecho a la vida”.
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Entre tanto, Claudia Bolaños, presidenta de la Asociación de Jardines Infantiles (Asoji), asegura que durante varios meses han sostenido reuniones permanentes, donde han brindado todos los procesos y protocolos que se deben tener en cada una de las instituciones y jardines infantiles.
Ellos necesitan de sus espacios escolares, de sus docentes y el acompañamiento emocional que se les ha brindado tanto a los padres de familia como a los niños en la institución
“Cabe mencionar que la Secretaría de Educación y todas las asociaciones de colegios privados y jardines infantiles estamos articulados en un equipo para trabajar diariamente durante las reuniones y poderlas articular en cada una de los procesos”, destaca Bolaños.
En cuanto a la receptibilidad por parte de los padres de familia de este esquema educativo, considera que ha tenido una respuesta: “Favorable, los padres están a gusto, saben que los niños están bioseguros, pues ellos necesitan de sus espacios escolares, de sus docentes y el acompañamiento emocional que se les ha brindado tanto a los padres de familia como a los niños en la institución”.
Para Catalina Vásquez, una de las madres de familia de los pequeños que estudian bajo alternancia, considera que este modelo le da “cierta seguridad”.
Con los protocolos que se han implementado ha disminuido el riesgo del covid -19, también la gripa común
“El colegio reaccionó muy rápido, nos planteó alternativas que de verdad funcionan. Antes mi hijo entraba al colegio y mantenía enfermito, siempre le daba gripa, y siento que ahora con los protocolos que se han implementado ha disminuido el riesgo del covid -19, también la gripa común y otro tipo de enfermedades”, señala la madre de familia.
Esta situación la atribuye a los estrictos protocolos de bioseguridad que implementa la institución que a la que asiste su hijo.
“Me parece que los protocolos funcionan, como el lavado de manos, el uso de dispensadores permanentemente y el uso de tapabocas de todo el personal, que hace que ellos se lo quieran poner. Mi hijo no se lo quita y en casa lo usa de manera regular”, destaca Vásquez.
CALI
