En los últimos días la expidió una circular para que se investigue la utilización de las Unidades de Cuidado Intensivo () ante las denuncias sobre un supuesto “mal uso” de las mismas en el país.
Las declaraciones no fueron bien recibidas por los trabajadores de la salud en el país, quienes aseguran que no se puede generalizar y dudar de la ética con la que trabajan.
El director científico de la Clínica VIP en Bogotá, el doctor Diego Cubillos, señaló que fue un error el contexto en el que el ministro presentó las posibles irregularidades y que además el país necesita tener claridad sobre las investigaciones, al menos, las ciudades u hospitales en las que se están haciendo.
“Por muchas causas un paciente entra a cuidado intensivo, no solo por covid-19 (…) yo dudo que un grupo de cuidado intensivo sea capaz de dejar pacientes hospitalizados por facturar más y por covid-19 peor, porque es un riesgo permanente”, detalló Cubillos.
El doctor de la clínica VIP Bogotá señaló que las autoridades nacionales deben precisar qué van a investigar y si son problemas de información o errores de la atención hospitalaria.
Esta posición es respaldada por el doctor William Aristizábal, gerente de la Clínica Medical en Bogotá y presidente de la Unión de IPS en Colombia, quien negó que algún médico en el país recibe dinero extra o incentivos por tener a un paciente un día más en una UCI, pues hay criterios establecidos por la ley para este tipo de atención.
“Cuando un paciente está en UCI los costos son mayores, por la cantidad de talento humano que se necesita que es mucho mayor. Por ser un área crítica los elementos de protección personal son más costosos que cuando el paciente está en hospitalización (…) eso es desconocer cómo funciona y qué se hace en una UCI”, precisó Aristizábal.
Sobre las investigaciones, ambos representantes del sector explicaron que el seguimiento de las entidades territoriales, los Centros de Regulación de Urgencias y Emergencias e incluso de las Empresas Prestadoras de Salud es continuo, por lo que pidieron que las acusaciones, si las hay, sean específicas.
Mediante la circular externa 012 del 2 de junio de 2020, la Superintendencia de Salud impartió instrucciones relacionadas con el cumplimiento de los “lineamientos para el manejo clínico de pacientes con infección por el nuevo coronavirus”.
En la circular se pide a las IPS, entidades administradoras de Planes de Beneficios, Secretarías de Salud y CRUE (Centros de Regulación de Urgencias y Emergencias) fortalecer los canales de comunicación y realizar las auditorías necesarias para verificar “la pertinencia y oportunidad en el ingreso, estancia y egreso en las hospitalización en las UCI.
“Eso es crítico, cada paciente que esté ocupando una UCI y no amerite estar ahí nos genera un problema para los demás pacientes que están en lista. Algunas instituciones no reportan a los CRUE las camas que tienen desocupadas y eso genera inmediatamente un problema para tener la contabilidad adecuada”, dijo el , Fernando Ruiz, en el espacio de televisión ‘Prevención y Acción’.
En ese mismo espacio, el presidente Iván Duque señaló que las instrucciones a la Superintendencia de Salud estaban claras y que no quiere “ver de ningún actor en el sector demoras injustificadas o que se estén trasladando pacientes que deberían estar en otro tipo de cuidado a UCI”.
Añadió que para el buen uso de las se debe contar con total transparencia y responsabilidad .
De igual forma, la Procuraduría General de la Nación pidió esta semana a las IPS, EPS y Secretarías de Salud departamentales y municipales aumentar la vigilancia al uso de las Unidades de Cuidado Intensivo en el país.
En las últimas horas, el gerente para la atención del , Luis Guillermo Plata, presentóun balance de cómo se ha preparado el país desde que comenzó la emergencia.
En cuanto al equipamiento de ventiladores para UCI, el gerente para la pandemia precisó que este mes llegarán al país 1.026 de estos elementos para aumentar la capacidad y para octubre Colombia contará con 4.458 ventiladores nuevos para atender la pandemia.
Además, expuso que el país ha comprado 44,7 millones de elementos de protección personal para los trabajadores de la salud, entre los que destacan 15 millones de tapabocas quirúrgicos, 11,9 millones de tapabocas N95 y 16,9 millones de guantes no estériles.