En materia concesionada, la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI), entidad adscrita al Ministerio de Transporte, está trabajando en la estructuración de más proyectos de todos los modos de transporte, además, en entregar prontamente las 4G que faltan por entrar en etapa de operación y mantenimiento y avanzar en los 5G licitados.
En entrevista con Portafolio, Francisco Ospina Ramírez, presidente de la ANI, habló sobre los avances que han tenido y los retos en materia fiscal para poder avanzar en su labor.
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¿Cómo han avanzado los proyectos los proyectos a su cargo?
Hoy, la ANI ha variado su portafolio. Inicialmente era muy carretero y hemos logrado a través de unos ajustes, una adaptación de la Agencia e incursionar en muchos más proyectos más allá de lo vial de manera eficiente.
No obstante, particularmente en lo vial, llevamos unos avances muy interesantes. Este año empezamos con ocho proyectos viales 4G en operación y mantenimiento, y ya llevamos cuatro proyectos más, y esperamos entregar varios más en lo que resta del año como Conexión – Norte y Cambao – Manizales. Vale mencionar que un proyecto de estos veintinueve le hicimos la terminación anticipada del contrato de manera bilateral: Pamplona-Bucaramanga, así que realmente son veintiocho proyectos.
Además, hay que tener en cuenta que todos los proyectos salvo uno de 4G deberían haber empezado la fase de operación y mantenimiento, salvo Autopistas del Caribe. Claro que había una cantidad de dificultades para destrabar ciertos proyectos y es este gobierno el que, pese a todo el ruido, y todas las inquietudes, logró poner proyectos en operación y mantenimiento.
¿Ya liquidaron el contrato de Pamplona – Bucaramanga?
En Bucaramanga-Pamplona tuvimos una orden de un laudo arbitral donde nos ordena terminar el contrato, básicamente por la imposibilidad de acceder a las vías industriales por parte del concesionario y como un acuerdo con el concesionario llegamos a la fórmula de terminación del contrato.
En este momento se están atendiendo 17 puntos críticos de la vía, pero lamentablemente no se están ejecutando obras que estuvieron previstas inicialmente en ese contrato. Ahora, etapa de reversión, luego de eso sigue la liquidación.
¿Les interesa volver a estructurar este proyecto?
Para madurar un proyecto de concesión toma entre tres años y cuatro años. En este momento no tenemos ni iniciativas privadas ni iniciativas públicas que giren en torno a ese corredor. Es muy probable que pase al Invías y eventualmente se puede retomar el proyecto por parte de la ANI.
¿Cómo ha avanzado el proyecto de Autopistas del Caribe?
En Autopistas del Caribe esperamos poder, a través de tarifas diferenciales para la población, tener la continuación entre Turbaco y Cartagena. Finalmente son 15, 8 kilómetros, que se todos los días y pues en Colombia la infraestructura vial debe ser pagada, la utilización, por los mismos usuarios de acuerdo con la ley 105.
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Autopistas del Caribe
Autopistas del Caribe
¿Cómo avanzan sus proyectos 5G?, ¿Se han visto perjudicados por los recortes presupuestales?
Primero me gustaría decir que en los 5G uno de los grandes retos que tenemos fue lograr que arrancaran. Gran parte de las dificultades de las 4G es que no arrancaron a tiempo por temas ambientales, prediales y sociales y todo eso en algunos proyectos generó un desequilibrio económico que llevó a que los proyectos fueran inviables o incluso llevaron a que hubiese una gran litigiosidad por parte de las concesiones tratando de buscar nuevamente el equilibrio económico.
Nosotros con los seis proyectos 5G hemos tenido un foco particular. Gracias ya tenemos un proyecto que va casi al 10% en la etapa de construcción: La Malla Vial del Valle, y los otros cinco proyectos están o con cierre financiero, que es un hito importante en estos proyectos o con la fase de construcción a corto plazo, muy particularmente en Buga- Buenaventura. Este proyecto que es el único que no tiene hoy formalmente cierre financiero, pero ya inicia construcción en agosto.
¿Y sobre los proyectos que lanzarán a licitación? Se ha dicho varias veces que saldrán pero no lo hacen, ¿por qué?
Hay una realidad en lo vial y es que hace unos 10-12 años se tomaron grandes decisiones relacionadas con la infraestructura estratégica vial en Colombia. Tal vez esta dinámica no se volverá a dar en esa escala, pues porque ya se están conectando los corredores logísticos estratégicos del país. Probablemente hay algunos corredores que se tienen que reforzar, un tercer carril en algunas vías, bueno, la evolución natural de la logística y del transporte, pero no en esa escala que se vivió hace 12 años.
En este momento estamos con seis proyectos 5G y muy probablemente este año estén los pliegos de los dos proyectos carreteros de gran escala. Estamos hablando de Villeta – Guaduas y de Popayán – El Estanquillo, que esperamos que entre octubre y diciembre estén los pliegos en el SECOP para su eventual adjudicación.
Vimos que estaba también para adjudicar La Dorada – Chiriguaná a fin de año, pero lo corrieron para 2025, ¿por qué?
Está pendiente la aprobación del Consejo Nacional de Política Fiscal, el CONFIS. Esa reunión o esa aprobación esperamos que se dé pronto. Una vez se realice el CONFIS y tengamos las actas, la ANI está totalmente lista para publicar el proceso.
¿Qué mensaje darle a la banca y los constructores que desean pronto más proyectos?
El primero es que la política pública del Gobierno Nacional se tenía que irradiar en los proyectos de concesión. Esos proyectos naturalmente venían de una materialización en el pasado, venían con unas políticas, entendemos y acatamos la ley 1508, pero naturalmente se tenían que adaptar ciertas situaciones a las políticas públicas emitidas por el Gobierno Nacional, por ejemplo, lo que respecta a peajes, los incrementos y demás.
Lo segundo es que se están materializando los proyectos que hemos venido estructurando. También desde la ANI teníamos un marco de gasto de mediano plazo, que se materializan los CONPES que se han venido surgiendo y pues naturalmente en la medida en la que estos CONPES nos viabilicen los recursos, los proyectos serán publicados.
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La Dorada – Chiriguaná
ANI
¿Han pensado en cambiar el modelo de operación y mantenimiento de los proyectos para optimizar los recursos?
Los peajes hacen parte del modelo financiero con el cual se estructuran esos proyectos. Hay proyectos donde exclusivamente la fuente de ingresos son los peajes -Iniciativas Privadas-, hay otros donde se combinan las vigencias futuras con los peajes -App-.
Estas decisiones de qué peajes nuevos se instalaban, de cuáles eran las tarifas de esos peajes, naturalmente se tomaron desde la estructuración de los proyectos, nosotros lo que estamos trabajando con concesionarios y demás es tratando de entender la forma en la que esas tarifas contractuales se puedan implementar generando el menor efecto en las comunidades principalmente las que viven cerca a estos, a través de tarifas diferenciales.
No obstante, hay que ser claros, desde nuestra responsabilidad contractual los peajes, no se pueden retirar, los peajes no se pueden modificar (en las tarifas) sin que haya una fuente alterna de pago de esta infraestructura, porque reitero no son ganancias de los concesionarios, sino hacen parte del modelo financiero y los ingresos previstos por el concesionario y por el Estado cuando se aprobó en su momento.
Es importante comentar que muchos de los proyectos 4G contentos contemplan que una vez la unidad funcional entra en operación de mantenimiento, se hace la instalación del peaje y se actualizan las tarifas contractuales, esto hace que, ya que se están terminando los proyectos, se deban instalar o incrementar algunas tarifas.
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Vías 4G
ANI
En Colombia tenemos hoy en la ANI 119 peajes instalados y debemos tener 144 de acuerdo con los modelos contractuales de las 4G y la 5G una vez terminen las obras, es decir, que el avance en las obras es equivalente a la instalación y el incremento en algunas tarifas de peajes.
Desde el sector transporte a través de la unidad de planificación de infraestructura de transporte se está adelantando una consultoría con el fin de determinar cuál es la forma o de qué forma podríamos intervenir el sistema para que, con fuentes alternativas de ingresos, con otras opciones pues se pueda hacer la compensación de estos recursos a los concesionarios.
Sobre nuevas formas de financiación, ¿Cómo avanza el cobro por valorización predial?
Tanto la ANI como el Invias estamos sujetos al cobro de valorización por las obras viales, en tal sentido vamos a ser desde la ANI un actor relevante en esta estructuración y cobro de la valorización, particularmente para el tramo Cartagena -Barranquilla que es un sujeto activo.
Para implementar el cobro, se requieren unos levantamientos prediales y aquí tenemos unas dificultades, porque la situación catastral en Colombia, en esos sitios rurales, esta desactualizada. Inicialmente en este tramo de Barranquilla a Cartagena se consideraban 80.000 predios y hoy se cree que hay alrededor de 240.000 predios sujetos de cobro de valorización. Todo eso pues nos ha generado unas demoras en la implementación.
Se estima que alrededor del 50 % de los recursos podrían regresar a la región para ser reinvertidos en la misma región y esto es muy relevante, eso hace parte de las políticas del Ministerio de Transporte para su aplicación.
Esto es necesario para poder seguir reinvirtiendo en obras de infraestructura. En los proyectos 4G en este año hemos tenido más de 30.000 empleos directos relacionados con el desarrollo de infraestructura y necesitamos fuentes alternativas de financiación para que nuevos proyectos puedan ser viabilizados. Hoy la Agencia Nacional de Infraestructura tiene una más alta capacidad de estructuración de proyectos frente a lo que el Estado tiene capacidad de adjudicar.
Desde el cargo, ¿cuáles son sus retos?
El reto más grande es el fiscal, de las posibilidades financieras para materializar estos proyectos. Cuando se adjudicó el paquete de las 29 concesiones 4G se tomaron gran parte del cupo de App que tiene el Estado.
Este gobierno aumentó el cupo de App de 0,6 a 0,8, este incremento en el cupo abrió la posibilidad de que se puedan adjudicar nuevos proyectos y gracias a ello estamos con la altísima probabilidad de adjudicar El Estanquillo – Popayán y Villeta – Guaduas con un gran aporte de recursos públicos.
PAULA GALEANO BALAGUERA
Periodista de Portafolio