Varias personas en un Woolworths del sureste de Melbourne fueron hospitalizadas después de que informaron sentirse enfermas por oler el pan fermentado que quedó en el refrigerador de la panadería durante la noche.
Los servicios de emergencia respondieron a lo que inicialmente se informó como una fuga de gas en un centro de Woolworths en Mentone, Melbourne, el viernes por la mañana.
Una portavoz de Victoria Fire and Rescue dijo que uno de los trabajadores había dejado pan fermentándose en el refrigerador de la panadería durante la noche y se enfermó esa mañana después de oler la comida.
La causa parece haber sido psicosomática para los demás trabajadores.
Los servicios de emergencia, incluidos los paramédicos, descartaron la posibilidad de una fuga de gas.
Una portavoz de Victoria Ambulance dijo que tres mujeres, una de unos 50 años y dos de unos 20 años, junto con un hombre fueron transportados al Centro Médico Monash para observación.