Buenaventura será el escenario del tercer debate presidencial este miércoles organizado por Telepacífico y El País. Será importante porque vendrán todos los candidatos presidenciales (en los de Antioquia y Barranquilla habían excluido a Piedad Córdoba y Viviane Morales), todos los temas planteados serán en clave Pacífico, y ocurrirá en momentos en donde el estatus quo del puerto más importante de la región está cambiando políticamente.
Por un lado, el comité cívico del paro que exigía concretar más recursos para el puerto y mejorar las condiciones de salud y educación, además de titulación de tierras urbanas, y detuvo al puerto por 22 días en 2017 mostró en las legislativas un peso importante, luego de ser clave para que el senador polista Alexander López disparara su votación allá (pasando de 500 en 2014 a más de 19 mil votos en 2018) y ahora varios de los movimientos que lo conforman están organizándose a favor de Gustavo Petro.
Además, el Partido Liberal se quedó sin sus dos congresistas tras dividirse, y sus bases ahora estarían repartidas entre el uribista Iván Duque y Humberto de la Calle, mientras que maquinarias aceitadas, como la de La U, movieron sus votos a favor de los candidatos aliados de la gobernadora Dilian Francisca Toro, la primera baronesa electoral del departamento que adhirió a Germán Vargas Lleras.
En Buenaventura se vive una lucha por votos entre las élites políticas y las organizaciones sociales que, como hemos reportado, también se vive en Cauca y Chocó con los candidatos Petro, Duque y Vargas y que arrancó a siete semanas de las elecciones.
Factor Paro y Petro
Así como en las legislativas, el movimiento del paro cívico también jugará un papel activo en las presidenciales, toda vez que tras los resultados a favor de Alexander López, posicionaron al movimiento como un actor político importante que “manifestó su rechazo a la clase política tradicional y los castigó con su voto”, como nos dijo un periodista de la región.
Ya comenzaron a mostrar esa fuerza.
El jueves, el comité cívico anunció que se reunirá con todos los candidatos para escuchar sus propuestas y “compartir visiones de futuro y de desarrollo”. Reuniones que el comité dice que se las pidieron los candidatos, pero La Pacífico no pudo confirmar eso con las campañas.
De todos modos, según ocho fuentes del puerto (dos periodistas, dos miembros del comité y cuatro políticos de la región), los movimientos sociales que conforman el comité están jugados con el candidato Gustavo Petro, quien hizo campaña en el Puerto y ganó la consulta con más de 27 mil votos.
Según cuatro de esas fuentes, hay organizaciones sindicales, de estudiantes, de jóvenes que están haciendo campaña por Petro. “Estas bases son las mismas que hacen parte del movimiento del paro”, nos confirmó Víctor Vidal, uno de los líderes más visibles del paro.
Grupos como Buenaventura Humana y Avalancha Petrista, entre otros, suman más de 150 personas, según nos dijo el encargado de comunicaciones de Petro en el puerto, Fabio Castillo y tienen como objetivo articular las iniciativas en un comité central y crear nodos en las 12 comunas para hacer pedagogía, de los que ya tienen seis.
Los nodos, grupos pequeños de petristas que hacen trabajo barrial de base, es una fórmula utilizada por Petro para hacer campaña política, tal y como lo hizo cuando se lanzó a la Alcaldía de Bogotá.
Según las personas con las que hablamos, Petro jala votantes en el puerto por su discurso en favor de las comunidades afros (una de sus voceras ha sido la líder afro caucana Francia Márquez), de la educación pública, de la democratización de la tierra, contra la desigualdad, de un desarrollo con las comunidades y por su apoyo al Acuerdo de paz, banderas muy afines a los movimientos sociales que conformaron el comité del paro.
Ese mismo apoyo ciudadano es reconocido por la misma clase política. “Todo el mundo sabe que Buenaventura está con Petro”, nos dijo un uribista que está en la dirección de la campaña de Duque.
Sin embargo, ese apoyo ciudadano también tiene críticas, por la posible politización del Comité, que lleva un año en conversaciones con la Alcaldía y el Gobierno Nacional para el cumplimiento de los compromisos del paro.
“El apoyo a Petro muestra que lo que ocurrió en 2017 fue un paro político, organizado por el PCN (Proceso de Comunidades Negras, la organización que agrupa la mayor cantidad de consejos comunitarios afro) y Alexander López para conseguirle apoyos a Petro”, nos dijo un alto funcionario de la Alcaldía que conoce de la movida en el puerto.
Es cierto que el PCN apoya a Petro, incluso líderes del movimiento que políticamente estaban con La U como el caso de los miembros de la organización que apoyan al concejal Evangelista Aragón, ya le dijeron que no apoyarán a su candidato Vargas Lleras, sino al candidato de izquierda.
Pero Alexander López todavía no tiene carta blanca con su Partido, que está con Sergio Fajardo, para hacerle campaña abierta a Petro (aunque lo pidió, como contamos), luego de que en una reunión del comité ejecutivo del Polo en Bogotá la semana pasada no lo dejara en libertad. Aunque los dos concejales del Polo estarían con Petro.
Gente cercana al Senador, quien es hoy el principal elector de la izquierda en el departamento, nos dijo que van a esperar a que el partido les dé libertad pero que sus bases ya están con Petro; mientras que el excongresista del Polo Wilson Arias, que tiene su fortín con sindicatos y estudiantes del Sena en Cali, le dijo a La Silla Pacífico que ya se pondrá al servicio de Gustavo Petro por afinidades programáticas, por petición de sus bases y que ya notificó a su Partido.
Con esos nuevos apoyos fuera del clóset, la fórmula de Petro, la representante verde Ángela Robledo, visitó el Valle este fin de semana.
Y aunque el movimiento del paro se está midiendo durante estas elecciones -como lo hizo en las legislativas-, la verdadera prueba de que están consolidados solo llegaría hasta 2019, cuando planean lanzar candidatos a las regionales.
Pero los votos de Buenaventura también se los pelearán las maquinarias tradicionales, que aunque están disminuidas, siguen teniendo influencia en el puerto, como el caso de La U, de la mano del alcalde Eliécer Arboleda y la gobernadora Dilian Francisca Toro, el uribismo que quiere crecer y el Partido Liberal que busca cotizarse.
Duque va por empresarios y maquinarias
En Buenaventura como en casi todo el Valle, Iván Duque ganó su consulta, pero fue con casi cinco veces menos votos que los que tuvo Petro, quien sacó 27 mil votos y el uribista solo cinco mil. De todos modos, el uribismo tiene aire para crecer.
Una de las razones es que Duque ha atraído hacia el uribismo el voto anti-Petro, según nos dijo un dirigente de la región. Y por eso en esa campaña ya aterrizaron varios apoyos de partidos tradicionales a la campaña uribista, que coordina el electo representante bonaverense Milton Angulo.
Unos son conservadores (a través del concejal Jaime Andrés Olaya) y militantes liberales que en las últimas elecciones apoyaron al senador Edinson Delgado.
Aunque Delgado y el otro liberal del puerto, el representante Hernán Sinisterra, se quemaron en sus respectivas reelecciones, pese a que el último tenía el apoyo del destituido exalcalde Bartolo Valencia, el uribismo les ha coqueteado.
Según un dirigente liberal que conoce la movida, el uribismo a través de congresistas y amigos en común, les han pedido el apoyo a Duque. De todos modos, “eso quedó en stand by”, nos dijo la fuente, debido a que, como contamos, el Partido usará a su candidato Humberto de la Calle como ‘sombrilla’ hasta la primera vuelta.
La otra razón para que los uribistas crezcan son los empresarios, sector al que el expresidente Uribe es cercano en la región, en especial porque Elvia Lucy Abonce, una de las más importantes en el puerto, milita en el Partido y fue su candidata a la Alcaldía en 2015.
A través de ella y Angulo se han acercado empresarios pesqueros y grupos empresariales del puerto, nos dijo el electo congresista sin decirnos nombres.
Otras maquinarias, esta vez de barones condenados también coquetean al uribismo.
Según dos políticos del puerto, desde hace varias semanas el exsenador parapolítico Juan Carlos Martínez Sinisterra ha buscado aterrizar en esa campaña.
Si bien el antiguo PIN hizo PUN en el Pacífico (todas las apuestas del Negro Martínez se quemaron), su acercamiento no sería sorpresivo, toda vez que en 2014 apoyó la candidatura de Óscar Iván Zuluaga en las presidenciales.
“Uribe nos dijo que no todo el mundo se puede aceptar”, nos dijo a el congresista electo Milton Angulo, quien nos dijo que no ha recibido llamadas de Martínez.
De todos modos, la última palabra la tendrá como siempre Uribe, quien como revelamos es el encargado de realizar las negociaciones de alianzas individuales con los políticos y, en el Chocó ya se acercó a dos maquinarias de políticos condenados y con maquinaria en ese departamento.
Vargas, con los tradicionales
La otra maquinaria aceitada y que, a diferencia de la de Duque, tiene su fortín propio en el puerto, es la de La U ahora al servicio de Germán Vargas Lleras.
En el puerto, La U ganó en la Cámara, a través de Norma Hurtado, mano derecha de la gobernadora Dilian Francisca Toro, cuyo grupo político fue el primero de la colectividad en apoyar abiertamente a Germán Vargas Lleras.
Aunque la estructura vargasllerista es pobre en el municipio (en las elecciones de marzo sacaron poco más de dos mil votos, pese a que los principales electores, los congresistas José Luis Pérez y Carlos Motoa, tienen bases allá), tener a Dilian de aliada ayuda en el puerto, ya que de su lado está la maquinaria que apoyó al alcalde Eliécer Arboleda “que le responde a Dilian”, según un político local.
De hecho, desde la semana pasada La U y la campaña de Vargas en el Valle, a través de su gerente, el empresario Fernando Lenis, iniciaron reuniones para hacer eventos con el candidato en varios municipios, incluido el puerto.
Mientras las maquinarias, las bases sociales y los partidos se organizan a siete semanas de las elecciones, este miércoles será el primer cara a cara en el Puerto.
Fuente: La silla Vacía