Las familias de cuatro personas, incluidos tres adolescentes, que murieron en un accidente aéreo en febrero frente a la costa de Carolina del Norte están demandando a las compañías propietarias del avión y que emplearon al piloto, quien también murió. La demanda afirma que el piloto no pudo volar correctamente el avión monomotor en condiciones climáticas con visibilidad limitada, lo que hace que las empresas sean responsables.
Las ocho personas a bordo del Pilatus PC-12/47 murieron cuando descendió al Océano Atlántico frente a los Outer Banks. Cuatro adolescentes y dos adultos en el avión regresaban de un viaje de caza.. Los otros dos eran el piloto y su hijo adulto, que era estudiante de piloto, según la demanda.
La demanda por homicidio culposo se presentó el martes en el condado de Carteret contra EDP Management Group LLC y Green Assets, ambas de Wilmington, y Dillon’s Aviation de Greenville.
El avión despegó el 13 de febrero a primera hora de la tarde desde el aeropuerto del condado de Hyde, que se encuentra en tierra firme cerca de Pamlico Sound. El destino del avión era el suroeste cruzando el estrecho hasta Beaufort, que se encuentra en el extremo sur de Outer Banks en el condado de Carteret.
La demanda alega que el piloto Ernest «Teen» Rawls no pudo mantener el control del avión y voló incorrectamente en condiciones climáticas con visibilidad limitada que requería el uso de instrumentación.
La demanda también afirma que Rawls no pudo mantener una comunicación adecuada con el control del tráfico aéreo y no pudo evitar el espacio aéreo militar restringido, “lo que condujo a una ruta de vuelo errática e irregular”.
La demanda alega que Rawls confió indebidamente en un copiloto con “entrenamiento y experiencia inadecuados” para volar alrededor del espacio aéreo restringido y en esas condiciones climáticas. Según los informes, el hijo de Rawls, Jeffrey Rawls, tenía 20 horas de experiencia de vuelo, según la demanda.
La demanda también afirma que Rawls no realizó una evaluación adecuada de peso y equilibrio antes de despegar.
Una persona que contestó el teléfono en un número de Green Assets dijo que la compañía se negaba a comentar. El sitio web de Green Assets nombró a Hunter Parks, una de las personas que murió en el accidente, como su fundador y presidente. Su familia no está entre los que demandaron.
Los correos electrónicos y los mensajes telefónicos en busca de comentarios de Dillon’s Aviation and EDP Management Group no fueron respondidos de inmediato.
A fines de febrero, la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte dijo en un informe preliminar del accidente que el piloto no había hecho llamadas de socorro ni declaraciones de emergencia.
El avión había alcanzado los 4700 (pies, nivel medio del mar) y estaba ascendiendo rápidamente, según el informe de la NTSB. No hubo respuesta a las llamadas de un controlador de tráfico aéreo y se perdió el contacto por radar.
No se ha emitido un informe final de la NTSB.
Andrew Robb, un abogado de aviación con sede en Kansas City que presentó la demanda en nombre de las cuatro familias, dijo por teléfono que la falta de llamadas de socorro y el aumento de altitud del avión eran características de un piloto que se desorientaba espacialmente.
“Si hubo un problema con la mecánica o la electrónica o algo en ese avión que causó este ascenso de 3,000 pies, uno pensaría que el piloto habría hecho algún tipo de comunicación”, dijo Robb.
La demanda fue presentada por las familias de los pasajeros Noah Styron, de 15 años; Michael Pastor, 15; Jacob Taylor, 16; y Stephanie Fulcher, 42.
Otros que estaban a bordo incluían a Parks, de 45 años, y Jonathan Kole McInnis, de 15.
Rawls y su hijo vivían en Greenville, dijeron las autoridades en febrero. Fulcher, Parks y los cuatro adolescentes vivían en el condado de Carteret. El condado, en su mayoría rural, alberga pueblos de pescadores más antiguos, así como áreas turísticas que incluyen Emerald Isle y Cape Lookout National Seashore.
Los cuatro adolescentes asistieron a la escuela secundaria East Carteret, que tiene alrededor de 600 estudiantes.
Charlie Snow, un amigo cercano del piloto, dijo a The Associated Press en febrero que Rawls había volado previamente para la compañía de Snow, Outer Banks Airlines, y estaba altamente capacitado y era extremadamente capaz.
“Si alguien pudiera salir de algo, si fuera posible salir de eso, él podría haberlo hecho”, dijo Snow.