El dolor y la indignación han sacudido a la comunidad de Candelaria, Valle del Cauca, tras el hallazgo del cuerpo sin vida de Sofía Delgado, una niña de 12 años que desapareció el pasado 29 de septiembre cuando salió de su casa para comprar champú. Lady Zúñiga, madre de Sofía, hizo un llamado desgarrador a las autoridades para que se haga justicia por el atroz crimen de su hija, quien fue secuestrada, asesinada y desmembrada, según las investigaciones.
Sofía desapareció mientras realizaba una sencilla tarea: comprar champú para bañar a la perrita de la familia. Desde ese momento, su madre vivió una pesadilla de angustia e incertidumbre. El desenlace de esta tragedia llegó cuando las autoridades encontraron restos óseos que correspondían a la niña, cerrando una búsqueda de 18 días que conmocionó a todo el país.
“Ella solo iba por un champú, pero estamos rodeados de gente mala que siempre piensa en hacer cosas malas. En este caso nos tocó a nosotros”, expresó Lady Zúñiga en medio del dolor. Con la voz entrecortada, también pidió que todo el peso de la ley recaiga sobre los responsables, quienes fueron capturados días después del hallazgo.
Las autoridades lograron capturar a un hombre y una mujer, vecinos de la familia, quienes habrían confesado su implicación en el secuestro y asesinato de Sofía. De acuerdo con la gobernadora del Valle del Cauca, Dilian Francisca Toro, el principal sospechoso ya tenía antecedentes por abuso sexual de una menor en 2014 y habría intentado retener a otra niña días antes de la desaparición de Sofía.
“Es una persona que desde el 2014 había violado a una niña. Los días cercanos a este hecho parece que había querido retener a otra niña, la niña se escapó. Ya apareció este caso con la niña Sofía y con ella pudo realizarlo”, informó la gobernadora Toro.
Durante las investigaciones, la Policía halló fluidos biológicos humanos en las propiedades de los capturados, reforzando las sospechas en su contra. Estos elementos han sido clave para avanzar en el caso y dar un cierre a la búsqueda, aunque el dolor persiste en la comunidad.
Desde que se conoció la noticia del asesinato de Sofía, cientos de personas se reunieron en la casa de la familia en Candelaria para expresar su apoyo y exigir justicia. Incluso, algunos intentaron realizar una asonada contra la vivienda de los presuntos responsables. La consternación y el rechazo generalizado frente a este crimen han movilizado a la región, con un llamado unánime para que hechos como estos no queden impunes.
En su declaración, Lady Zúñiga se comprometió a luchar para que la muerte de su hija no sea en vano y que otras familias no vivan la misma tragedia. “En nombre de mi hija Sofía, seguiré el legado para que lo que estamos viviendo como familia no les toque a más familias y a más niños inocentes”, afirmó.
