Detenido no aceptó cargos por crimen de la estudiante Natalia Cortés en atraco – Cali – Colombia

Familiares, vecinos y compañeros de estudio se unieron el viernes para la despedida de Natalia Cortés Tenorio, estudiante de producción audiovisual digital, quien murió al recibir un tiro en un intento de atraco en la madrugada del martes pasado en el oriente de Cali.

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Este domingo, será un plantón en su memoria en el sitio donde un joven que intentaba despojarla de su pertenencias le disparó. 

El Juzgado le dictó aseguramiento, pese a que el detenido no aceptó cargos.

Natalia Cortés, quien cumplió sus 20 años el fin de semana pasado, estudiaba producción de medios audiovisuales digitales en el Servicio Nacional de Aprendizaje (Sena). Adelantaba su práctica profesional en una fundación dedicada a la salud de niños. Su sueño era convertirse en sicóloga.

A las 5:40 de la mañana, salió de su casa en el barrio Los Lagos, justamente, para cumplir con su práctica. La acompañaba su mamá, en un trayecto de tres cuadras para buscar un bus que la llevara del oriente al sur de la capital del Valle del Cauca.

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Cuando llegaban a vecindades del barrio Ricardo Balcázar, un joven tomó por detrás a Natalia y le dijo que le entregara lo que llevaba. «A mi chiquita no», dijo la mamá.

En la maleta, Natalia llevaba un computador portátil y su almuerzo. El asaltante, en un par de segundos, levantó el arma y disparó. 

La estudiante cayó por una herida de bala en la cabeza. Al sitio llegaron familiares y vecinos. La llevaron al hospital Carlos Holmes Trujillo, desde donde fue remitieron, de inmediato, a la clínica Valle del Lili. Unas horas después, fue declarada muerta.

Sus familiares hicieron la voluntad de donar órganos, como ella lo había expresado si algún día faltaba, para salvar y ayudar a las vidas de otras personas.

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Un apoyo ciudadano permitió a la Policía llegar hasta unos apartamentos vecinos al barrio Los Lagos, donde retuvieron a un joven que aparece como el presunto agresor y fue llevado ante un juzgado de Control de Garantías. El capturado, de 26 años, no registra antecedentes penales.

Ante un posible error en la identidad del detenido y uno de los abogados, el proceso se alargó y se vencieron los términos de 36 horas sin legalizar captura por lo que fue dejado libre.

La Fiscalía ajustó el procedimiento y la Policía volvió a darle captura. El viernes, en un juzgado, se tramitó la legalización de captura con cargos de homicidio en circunstancias de agravación punitiva en concurso heterogéneo con fabricación, porte o tenencia de armas, accesorios, partes o municiones y hurto calificado en el grado de tentativa.

El fiscal le explicó que podía acceder a beneficios de ley si confesaba el homicidio.

La audiencia fue suspendida a la espera de un diálogo del detenido con su abogado. Después de unos minutos el joven dijo que no aceptaba cargos, pero el juzgado le dictó el aseguramiento al evaluar los planteamientos de la Fiscalía y los reportes de Policía.