Economía de Colombia: visión que tienen las calificadoras de riesgo | Finanzas | Economía

Las nubes negras sobre las perspectivas de las calificadoras de riesgo frente a Colombia podrían estarse despejando.

Si bien en mayo Standard & Poor’s le quitó el grado de inversión al país, al cambiar su calificación de BBB- a BB+ con perspectiva estable, y en julio Fitch Rating tomó la misma determinación, y el nivel de Colombia pasó de BBB- a BB+ con perspectiva estable; la decisión que tomó esta semana Moody’s, de mantener la calificación de la deuda a largo plazo, marcó un primer paso para un panorama más alentador.

(Vea: Economía colombiana cerraría 2021 arriba de 8,5 %, según Asobancaria).

La calificadora decidió dejarle al país su nota en Baa2, y cambió a estable desde negativa la perspectiva de la calificación.

Dentro de los elementos que destacó Moody’s está el hecho de que el país, si bien ha tenido que enfrentar tensiones sociales, y desafíos de la pandemia, el Gobierno aprobó una serie de “medidas fiscales que respaldarán la estabilización de la deuda en los próximos años, manteniendo métricas crediticias de Colombia en línea con las de sus pares calificados en Baa2”.

Cabe recordar que el mes pasado el Gobierno logró la aprobación de la Ley de ‘inversión social’, una reforma tributaria que tiene una meta de recaudo con los ingresos permanentes de $15,2 billones.

Además, está reforma también surgió a partir del consenso con varios sectores, dado que en mayo el Gobierno tuvo que retirar otra iniciativa de corte tributario y fiscal que había radicado ante el Congreso.

(Vea: Moody’s reafirmó calificación crediticia de Colombia).

Moody’s también manifestó en su reporte que espera que el aumento de los ingresos generados por esta reforma conduzca a reducción del déficit y contribuya a estabilizar los ratios de deuda pública para 2022 o 2023. Igualmente, destacó que las autoridades fortalecieron el marco de política fiscal, con cambios en la regla fiscal.

En el caso de Fitch, y a pesar de que la firma redujo su nota hace tres meses, algunas señales muestran una mejor visión de parte de la calificadora.

Richard Francis, líder de la calificación de Colombia para la entidad, fue enfático en que el esfuerzo de reforma tributaria solo será suficiente para estabilizar el nivel de deuda a partir de 2023, pero también indicó a este medio que hay varias perspectivas favorables para el país gracias a la reforma.

(Vea: Fenalco descartó dar descuento extra a vacunados durante días sin IVA).

“La buena noticia es que creemos que la reforma es suficiente para ayudar a estabilizar la carga de la deuda en alrededor del 63% del PIB. También vemos la regla fiscal actualizada de manera positiva, con un límite de deuda neta del 70% del PIB y un ancla de deuda del 55% del PIB”, dijo.

Además, otra buena noticia está en que el pronóstico de crecimiento, que originalmente estaba en 6,3%, fue elevado a 7,9%.

Francis reconoció que los riesgos están balanceados actualmente, lo cual explica la perspectiva estable, pero no descartó la posibilidad de revisar nuevamente la posición de Colombia.

“Si el Gobierno puede lograr más medidas fiscales para aumentar los ingresos, disminuir aún más el déficit fiscal y comenzar a reducir el nivel de deuda hacia el ancla fiscal establecida en la regla fiscal actualizada, podríamos comenzar a ver un impulso positivo en la calificación y Colombia podría volver al grado de inversión”, aseguró el líder de la calificación para Colombia.

Standard & Poor’s, que fue la primera calificadora en retirarle el grado de inversión a Colombia, manifestó en su momento que el alto grado de incertidumbre con la situación fiscal del país había sido un factor para bajar su puntaje.

(Vea: La inflación anual en Colombia a septiembre fue de 4,51 %).

“Creemos que el ajuste fiscal de Colombia resultará más prolongado y gradual de lo que se esperaba anteriormente, disminuyendo la probabilidad de revertir el reciente deterioro de las finanzas públicas”, dijo la firma.

Sin embargo, para ese entonces no se había presentado la segunda reforma tributaria del Gobierno, y por ende esta tampoco había sido aprobada.

Aunque la firma no se ha pronunciado en torno a la posibilidad de una revisión de la nota soberana, a mediados de septiembre S&P indicó en un informe que espera un fuerte repunte económico durante los próximos dos años, con un crecimiento del producto interno bruto (PIB) real de aproximadamente 7,0% en 2021 y un 3,0% en 2022, después de la contracción del 6,8% en 2020.

En esa comunicación, S&P dijo también que esto ubicaría a Colombia entre los países con mejores perspectivas económicas de América Latina tanto para 2021 como para el año 2022.

(Vea: Los recursos extra con los que el Gobierno podría mejorar su caja).

Además señaló que considera que la recuperación económica del país la impulsará la mejora del consumo y la respaldará el sector servicios y las exportaciones de petróleo.

LAURA LUCÍA BECERRA ELEJALDE
Periodista Portafolio