SYDNEY, 4 abr (Xinhua) — El banco central de Australia, el Banco de la Reserva de Australia (RBA, por sus siglas en inglés), anunció hoy que el objetivo de la tasa de efectivo permanecerá sin cambios en 3,60 por ciento y la tasa de interés sobre los saldos de liquidación de cambios también permanecerá sin cambios en 3,50 por ciento.
La decisión de dejar la tasa de efectivo en suspenso es la primera vez en un año después de 10 aumentos consecutivos, que elevaron la tasa de interés en 3,5 puntos porcentuales desde mayo del año pasado en un intento por frenar la inflación vertiginosa.
Según los últimos datos de la Oficina de Estadísticas de Australia, el índice de precios al consumidor (IPC) mensual aumentó un 6,8 % en los 12 meses hasta febrero, frente al 7,4 % de crecimiento anual en enero y el máximo del 8,4 % en diciembre pasado.
El RBA dijo que la decisión es un intento de dar más tiempo para analizar el impacto del aumento de la tasa de interés y las perspectivas económicas, con un retraso en la política monetaria que sugiere que aún no se siente el efecto total del aumento de la tasa de interés.
A pesar de la moderación temporal del aumento de la tasa de interés, el gobernador del RBA, Philip Lowe, reafirmó que es posible que se necesite un mayor endurecimiento de la política monetaria para garantizar que la inflación regrese al objetivo.
«La junta busca devolver la inflación al rango objetivo del 2-3 por ciento mientras mantiene la economía en equilibrio».
«Al evaluar cuándo y cuánto más deben aumentar las tasas de interés, la junta prestará mucha atención a la evolución de la economía mundial, las tendencias en el gasto de los hogares y las perspectivas de inflación y el mercado laboral», dijo Lowe.