Cinco personas han muerto a causa del ébola en Uganda y otras 19 muertes probablemente fueron causadas por la enfermedad, dijo el presidente el miércoles, pero dijo que no ordenaría un cierre porque el ébola es más fácil de manejar que el COVID-19.
El brote de la fiebre hemorrágica mortal se anunció la semana pasada, lo que generó temores de una gran crisis de salud en el país de 45 millones de habitantes.
No existe una vacuna para la cepa sudanesa de la enfermedad detrás de las últimas infecciones en Uganda.
En un discurso televisado, el presidente Yoweri Museveni dijo que además de las cinco muertes confirmadas por ébola, otras 19 muertes en la comunidad probablemente se debieron a la enfermedad, ya que mostraron síntomas similares, pero no se les tomaron muestras para confirmar esto antes de su muerte.
También se han confirmado otros 19 casos de la enfermedad, dijo.
Dijo que entre los otros contagios confirmados había seis trabajadores de la salud, entre ellos cuatro médicos, un estesiólogo y un estudiante de medicina.
“Lávese las manos con agua y jabón o use un desinfectante a base de alcohol. Evite el contacto con los fluidos corporales de cualquier persona”, dijo Museveni, y agregó que los brotes de ébola eran más fáciles de manejar que los de coronavirus, que se transmiten por el aire.
El ébola se propaga principalmente a través del contacto con los fluidos corporales de una persona infectada.
La enfermedad viral tiene síntomas que incluyen debilidad intensa, dolor muscular, dolores de cabeza y dolor de garganta, vómitos, diarrea y erupciones cutáneas, entre otros.
La Organización Mundial de la Salud dice que la cepa Ébola Sudán es menos transmisible y ha mostrado una tasa de mortalidad más baja en brotes anteriores que su primo Ébola Zaire, una cepa que mató a casi 2300 personas en una epidemia de 2018-2020 en la vecina República Democrática del Congo.
Las últimas infecciones estallaron en el distrito de Mubende, en el centro de Uganda, a unos 140 kilómetros al oeste de la capital, Kampala.
Desde entonces se ha extendido a dos distritos más. “El gobierno tiene capacidad para controlar este brote como lo hemos hecho antes. Por lo tanto, no hay necesidad de ansiedad, pánico, restricción de movimiento o cierre de lugares públicos”, dijo Museveni.