Paz y Derechos Humanos, Quibdó – Chocó, 24 de julio de 2024 || Desde el Foro Interétnico Solidaridad Chocó, queremos expresar nuestra profunda preocupación por la posibilidad de que se levante la mesa de negociación entre el Gobierno Nacional y el Ejército de Liberación Nacional (ELN). Este proceso de diálogo es crucial para avanzar hacia una paz duradera en nuestra región y en todo el país. En este sentido, hacemos un llamado urgente a ambas partes para que no se retiren de la mesa y que, en su lugar, sostengan y extiendan la prórroga del cese al fuego, que está programada hasta el 3 de agosto.
El cese al fuego ha representado un respiro significativo para nuestras comunidades étnicas, que han sido víctimas del conflicto armado en Colombia por décadas. La suspensión de hostilidades ha permitido una disminución de la violencia, brindando una oportunidad invaluable para que las familias vivan en paz y seguridad, se fortalezcan los procesos comunitarios y se avance en la construcción de un futuro mejor para todos.
Para las comunidades afrodescendientes e indígenas del Chocó, el cese al fuego no es solo una pausa en la confrontación, sino una ventana para reconstruir el tejido social, recuperar las tradiciones y asegurar el acceso a los derechos fundamentales. La continuidad de este proceso de paz es esencial para proteger nuestras vidas, nuestra cultura y nuestro territorio, los cuales han sido históricamente amenazados por la guerra.
Además, es fundamental reconocer que la paz no solo es la ausencia de conflicto, sino también la presencia de justicia social y económica. Instamos al Gobierno Nacional y al ELN a que no solo mantengan el cese al fuego, sino que avancen en la implementación de medidas que promuevan la equidad y la inclusión, abordando las causas profundas del conflicto.
Esto incluye la inversión en infraestructura, educación, salud y la protección del medio ambiente, aspectos vitales para garantizar una vida digna y sostenible para todas las comunidades del Chocó.
Hacemos un llamado a la comunidad internacional y a las organizaciones de derechos humanos para que apoyen y monitoreen este proceso, garantizando que se respeten los acuerdos y se escuchen las voces de las víctimas del conflicto. Solo mediante un esfuerzo conjunto podemos alcanzar una paz verdadera y duradera.
Reiteramos nuestra firme convicción de que el diálogo es el camino hacia la reconciliación y la justicia. Por ello, desde nuestra Agenda Interétnica Regional de Paz y el Acuerdo Humanitario Ya, solicitamos a las partes a perseverar en su compromiso con la paz, a no levantarse de la mesa de negociación y a continuar con los puntos acordados en la agenda. ¡La vida y el bienestar de los chocoanos y de miles de colombianos dependen de ello!.
