La población ahora es libre caminando por todas partes del municipio
El municipio de El Molino, ubicado en el sur del departamento de La Guajira, ha sido declarado libre de sospecha de minas antipersonal, un logro importante tras años de riesgo por la presencia de estos artefactos explosivos. Este municipio, de gran valor cultural y natural, presentaba contaminación por minas, lo que en el pasado había causado la trágica pérdida de vidas civiles.
El proceso comenzó
En 2023, soldados del Batallón de Ingenieros de Desminado Humanitario N.° 7 iniciaron un ambicioso proceso de investigación y desminado en diversas zonas del municipio. Las labores se centraron en áreas rurales y urbanas, incluyendo comunidades indígenas como Campo Alegre y El Molino, de la etnia Cariachil, así como los consejos comunitarios afrodescendientes Ramón José Bolaño Gonzales, Monche y Teófilo Rojas Bolaños.
El proceso también abarcó la descontaminación de ecosistemas estratégicos del municipio, como el Parque Natural Regional (PNR) Cerro Pintao, el Distrito Regional de Manejo Integrado (DRMI) y el Distrito de Conservación de Suelos (DCS), que forman parte de la Serranía. del Perijá. Estos espacios, ricos en biodiversidad y recursos hídricos, han recuperado su seguridad, permitiendo que vuelvan a ser utilizados para actividades sostenibles y productivas, como el ecoturismo
Educación
Además de los trabajos de destino, el Ejército Nacional ha desarrollado un componente educativo fundamental para la seguridad de la población. Se realizaron talleres sobre el riesgo de minas antipersonal, con el fin de fomentar una cultura de prevención entre los habitantes de El Molino. Cerca de 600 personas, entre niños, jóvenes y adultos, participarán en estas actividades, que incluyen la popular estrategia de títulos «Nata Desmina», diseñada para enseñar de forma lúdica.
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Un logro importante
Con la declaración de El Molino como territorio libre de sospecha de minas antipersonal, ya son ocho los municipios en La Guajira que han sido despejados de este tipo de peligros gracias al trabajo del destino humanitario. Este avance no solo mejora la seguridad de los habitantes, sino que también abre nuevas oportunidades para el desarrollo económico y social de la región, especialmente en áreas rurales que antes eran inaccesibles o peligrosas.
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El compromiso del Ejército Nacional con el bienestar de las comunidades y la preservación del medio ambiente es evidente en estos logros. Los esfuerzos de desminado no solo permiten que la gente recupere sus tierras, sino que también promueven la convivencia pacífica y el desarrollo sostenible en territorios.
El Molino, con su riqueza étnica y natural, es hoy un ejemplo de superación y con la capacidad de recuperar su estado inicial cuando ha cesado la perturbación a la que había estado sometido. Las comunidades que habitan este municipio pueden ahora mirar hacia el futuro con esperanza, sabiendo que pueden caminar por el territorio sin miedos, porque ya no hay minas quiebra patas.