Horas antes, parecía que el estadounidense de 24 años, clasificado en el puesto 20 del mundo, no podría tomar la cancha para lo que resultaría ser la mayor victoria de su carrera.
Pero después de un tratamiento para aliviar el dolor y contra el consejo de varios en su campo, Fritz se encontró celebrando un triunfo por 6-3, 7-6 (7/5) sobre el 21 veces campeón de Grand Slam.
«Al final, me alegro de haber tomado esta decisión», dijo Fritz. «Veremos cómo está mañana. Tengo una resonancia magnética mañana».
Reconoció que su participación en el Masters de Miami de la próxima semana es ahora «cuestionable».
Pero no se arrepiente de ser tan «increíblemente terco».
El californiano de 24 años dijo que eso es parte de lo que lo ayudó a recuperarse a tiempo para Wimbledon el año pasado después de que partió de Roland Garros en silla de ruedas y luego se sometió a una cirugía para reparar el daño en su rodilla derecha.
«Creo que soy una persona extremadamente terca», dijo sobre su capacidad para sacudirse las lesiones. «También creo que tengo una tolerancia al dolor muy alta y no tengo mucha consideración por dañarme potencialmente peor si creo que hay una posibilidad de que pueda entrar a la cancha y jugar.
«Probablemente son muchas cosas no tan buenas las que me llevan a la cancha», agregó Fritz, quien también siguió jugando en Toronto el año pasado cuando «veía confuso y casi se desmayaba».
Tenía muchos incentivos para resistir el domingo, con la oportunidad de jugar contra uno de los grandes del juego en un torneo al que asistió con su padre cuando era niño y crecía en el sur de California.
La recompensa fue un primer título de Masters 1000 que lo convirtió en el primer estadounidense en ganar en el nivel élite desde que John Isner ganó en Miami en 2018.
«Mi papá me trajo aquí cuando era niño», dijo Fritz. «Me dijo que iba a ganar este torneo un día cuando era un niño pequeño.
«Estaba muy, muy orgulloso de mí», dijo Fritz sobre su emotiva charla posterior al partido con sus padres. «Y es realmente difícil obtener un cumplido de él».
Si bien la lesión en el tobillo de Fritz puede mantenerlo fuera de Miami, cree que su victoria en Indian Wells es un paso hacia su objetivo actual de llegar al top 10.
«Esto obviamente ayuda mucho», dijo. «Obviamente me encantaría ir mucho más alto que eso y lograr mucho más que eso».
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