A pesar de que Singapur fue derrotado por 3-1, Hassan realizó muchas paradas a quemarropa que aseguraron que China pasara a la siguiente ronda a expensas de los tailandeses, logrando fama de la noche a la mañana.
«Es sorprendente ver cuánto amor y apoyo estoy recibiendo aquí», afirmó Hassan, que estará en Shanghai hasta el martes.
A sus 40 años, Hassan tiene una edad que la mayoría de los futbolistas profesionales ya se habrían retirado, pero el portero de Singapur tiene otros planes.
«Me quedan algunos años más, por lo que ahora se trata de hacer cosas para asegurarme de prolongar mi carrera, porque todavía tengo el interés y el amor por el juego», dijo.
EL BRINDIS DE CHINA
Después de su actuación como portero que indirectamente ayudó a China a avanzar, Hassan comenzó a recibir mensajes de apoyo.
Al día siguiente, aficionados chinos agradecidos en Singapur abarrotaron Dapur Hassan, el puesto de comida de su familia en Tampines, lo que provocó que se agotaran antes de tiempo.
Los fanáticos en China que querían expresar su gratitud transfirieron dinero a la cuenta Alipay del puesto, luego de que los internautas circularan fotos de su código QR de pago en línea.
