En marzo del 2020 todo cambió. La llegada de un enemigo invisible, una pandemia desconocida, llevó a cambiar las rutinas de las personas de la noche a la mañana. Las órdenes de aislamientos colectivos y cuarentenas impidieron el regreso a la presencialidad de muchos empleos, adaptándose a la virtualidad a la fuerza y dejando en el retrovisor a los escritorios.
Ahora bien, una vez pasadas ya tres olas de la pandemia (estamos entrando en la cuarta) y gracias al avance del plan de vacunación, las autoridades gubernamentales han acelerado el proceso de reactivación y el regreso a la presencialidad, con el cual empleados de muchas compañías ya han comenzado a retornar a sus labores en las sedes de las empresas, lo cual beneficia al mercado de las oficinas, que puede convertirse en un termómetro para medir el regreso a la actividad económica plena.
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De acuerdo con la inmobiliaria Century 21, esta ocupación ronda hoy en día el 50 % del mercado y la tendencia es que ese porcentaje siga en crecimiento en la medida en que los empresarios programen la presencialidad.
“Las oficinas actuales, las que ya venían trabajando, están reportando una ocupación entre el 40 % y 50 %. Estamos viendo un regreso paulatino”, señala Alberto Rodríguez, presidente de Century 21 en Colombia.
Rodríguez argumenta que esa cifra puede ir incrementándose cuando los directivos determinen el modelo laboral de su plantilla. Es decir, si se decantan por uno híbrido o uno enteramente presencial.
De hecho, la Federación Nacional de Comerciantes (Fenalco) publicó una encuesta en la que el 65 % de los entrevistados reveló que las áreas de recursos humanos de sus empresas no continuarán laborando bajo la modalidad de trabajo en casa o teletrabajo.
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Ahora bien, aunque sí se han registrado avances en la recuperación del mercado de oficinas –aún a nivel nacional, pero sobre todo en Bogotá–, se presentan altas tasas de disponibilidad alejadas del promedio estándar.
“Para el cierre de año estamos viendo un mejor comportamiento en la ocupación de espacios, que se ha dado principalmente por dos operadores: BPO y call centers. Así se ha generado una mayor competitividad y, por ende, también en la tasa de disponibilidad. Con corte del segundo trimestre, dicho indicador está en 10,9 %, esperando que se mantenga entre el 10 % y el 12 % para cierre de año”, afirma Felipe Becerra, director de inteligencia de mercados de Colliers Colombia.
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Esa inmobiliaria prevé un escenario de crecimiento del 7,5 % para el cierre del 2021, lo cual, alineado con una mejor tasa de desempleo, llevaría a un mercado laboral más
activo.
“Si juntamos esto con un retorno paulatino a las oficinas, volveríamos a ver buenos niveles en la ocupación de espacios. Para finales del 2022 esperamos una recuperación en la tasa de disponibilidad por debajo de doble dígito”, aseguró el
directivo de la firma.
En cuanto a la vacancia en Bogotá, el presidente de Century 21 advierte que ella ronda entre el 20 % y el 60 %, dependiendo de la zona de la capital en la que se evalúe.
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“En el centro de la capital hablamos de una cifra de cerca del 60 %. La del 20 % se da en el norte de la ciudad”, explica.
Por su parte, el director de inteligencia de mercados de Colliers Colombia espera que, de cara al tercer trimestre del 2021, la ocupación de espacios mejore en la capital del país, cuya tasa de disponibilidad es del 11,3 %, la cual crece un punto porcentual versus el primer trimestre y tres puntos porcentuales al analizarla con respecto al mismo lapso del 2020.
“Esperamos que para el cierre del 2021 esa tasa disminuya un par de puntos porcentuales, sin ser nada drástico. Los BPO y call center están siendo los más activos”, indica el investigador.
Por otro lado, al hacer un barrido por regiones, según un estudio de la misma agencia, Medellín es la capital del país con la tasa de disponibilidad más baja del mercado, al ubicarse en 6,9 %, cifra que se mejora con relación a la del primer trimestre en 15 puntos porcentuales.
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PREFERENCIAS POR EL MODELO HÍBRIDO
Al mismo tiempo de la recuperación paulatina del mercado de oficinas, en el país se viene desarrollando una discusión sobre el modelo laboral de preferencia, luego de las tendencias que trajo consigo la pandemia, cuando la productividad se volvió
un concepto que no está íntegramente ligado con la presencialidad.
De acuerdo con un estudio de la Universidad del Rosario y la firma Cifras y ConceptoS, los colombianos se inclinarían por un modelo de trabajo híbrido.
El 55 % de los consultados señaló que prefiere trabajar en un horario flexible, mientras que el 31 % prefiere estar presente en el lugar de empleo.
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Al observar con lupa los resultados de este estudio se aprecia que el 67 % de las personas consultadas entre los 26 y 35 años también preferiría el sistema híbrido, al tiempo que al 60 % de los mayores de 65 años le gustaría retornar de manera física.
“Estas preferencias –explica el investigador laboral Iván Jaramillo, de la Universidad del Rosario–, están relacionadas con el factor que los colombianos encontraron
en la virtualidad: reducción en los tiempos de traslado, especialmente en una ciudad como Bogotá, y correlación de asuntos privados estando dentro del hogar”.
De acuerdo con el estudio, el 36 % de los encuestados confesó estar “comiendo bien”, al tiempo que el 24 % señaló estar durmiendo más horas, mientras que el 18 % dijo terminar de trabajar a la hora normal y un 14 % vio positiva la posibilidad de algo casi impensable en tiempos de la prepandemia: tomar siestas.
La pandemia aún no se ha terminado, y sigue habiendo restricciones y riesgos al ejecutar la vuelta de los empleados a las oficinas.
No obstante, esta es una tendencia que ya inició y la cual se podrá convertir en otro de los indicadores de la reactivación económica del país.
ROBERTO CASAS LUGO
Periodista Portafolio