Los fangos activados, sean en una u otra modalidad, son una tecnología muy consolidada y establecida en el mercado de equipos prefabricados, candidatos indiscutibles en un gran número de situaciones. Se trata, como es bien sabido, de una tecnología intensiva, con demanda de energía eléctrica y cierta dependencia tecnológica. Su comportamiento con caudales y cargas cambiantes es inestable. No perdamos de vista que si algo caracteriza a las pequeñas poblaciones es precisamente el modo en el que se acentúa estos cambios (estamos hablando de poblaciones inferiores a los 200 he, frecuentemente con ocupaciones irregulares a lo largo del año e incluso dentro de una misma semana). Un correcto mantenimiento requiere con frecuencia una externalización del servicio.
Los fangos activados implementados en equipos prefabricados requieren de un control de los principales parámetros de proceso. La concentración de microorganismos en el reactor se ve muy afectada por las modificaciones de caudal y carga. También por las dificultades que presenta la recirculación de fangos en reactores de tan pequeño tamaño, lo que se traduce en fangos permanentemente jóvenes, problemas en la clarificación y, finalmente, vertidos de mala calidad.
La tecnología Ecoflo® se puede entender como un humedal de flujo subsuperficial vertical con un soporte vegetal de alta eficiencia
Como alternativa a los fangos activados, se presentan también los humedales construidos, una tecnología no convencional, extensiva, con bajos requerimientos energéticos y, en definitiva, de gran interés en muchas situaciones.
Dentro de las múltiples posibilidades de los humedales construidos, se consideran los de flujo subsuperficial, dejando aquellos de lámina libre para otro campo de aplicaciones. El flujo de circulación vertical, por los menores requisitos de espacio, es el que se contrasta con el Ecoflo®.
Frente a un material de relleno convencional, se presenta una mezcla de fibras vegetales, fruto de un largo trabajo de investigación
A costa de una mayor necesidad de superficie para su implantación, el control de las variables de proceso se simplifica, se evitan equipamientos electromecánicos en general y los problemas de recirculación y gestión de fangos en exceso desaparecen. Uno de los principales inconvenientes de estos es la presencia de finos en el medio que se emplea como soporte, que compromete el rendimiento, y en casos extremos, puede hacer fracasar la instalación al producirse vías preferentes de circulación de agua y problemas de aireación. Los finos están muy asociados al tipo de relleno empleado, frecuentemente mineral. Son necesarios áridos lavados y con una naturaleza química que minimice su generación al contacto con los ácidos orgánicos de las aguas residuales, y esto no es siempre fácil de controlar. Por otro lado, la carga orgánica que podemos aplicar es baja, lo que se traduce en requisitos mayores de superficie, como, por otro lado, es de esperar.
Instalación humedal construido en Campamento Juvenil.
Ecoflo® es una tecnología no convencional prefabricada. Se puede entender como un humedal de flujo subsuperficial vertical en el cual se ha sustituido el relleno mineral por un soporte vegetal de alta eficiencia. Se trata de mejorar el concepto inicial de humedal en aquellas poblaciones en las que el uso de equipos prefabricados tiene sentido.
Frente a un material de relleno convencional, se presenta una mezcla de fibras vegetales, fruto de un largo trabajo de investigación, y con la que se ofrece en primer lugar un material de características estables y definidas. Junto a una elevada superficie específica se ofrece una alta porosidad, permitiendo una aireación óptima. Es un material libre de finos y, además, se ha comprobado que el nivel de degradación es mínimo, siendo inapreciables estos en periodos de funcionamiento de quince años. La mezcla de fibras tiene una gran capacidad de absorción de agua, reteniendo y conservando la humedad durante periodos prolongados de tiempo, y permitiendo la supervivencia de los microorganismos en episodios de bajo o nulo aporte de caudal. También se ha observado que cuando se restablece el caudal, la respuesta es rápida y el tiempo en normalizar los rendimientos es mínimo.
Cuando no es posible la implementación de fangos activados o cabe esperar resultados inciertos, Ecoflo® consigue rendimientos muy elevados
Como conclusión, remarcar que cuando no es posible la implementación de fangos activados o cabe esperar resultados inciertos por la distribución de los caudales, con Ecoflo® se consiguen unos rendimientos muy elevados, cumpliendo sobradamente los requisitos de vertido. El mantenimiento es simple, y no genera dependencia tecnológica. Por otro lado, frente a los humedales construidos conseguimos mayor fiabilidad (control del medio filtrante), menores requisitos de superficie en la medida en que las cargas orgánicas que podemos aplicar sobre el relleno son sustancialmente mayores, rápida puesta en obra y menores costes de inversión por habitante equivalente.
Con el creciente interés que está tomando la depuración de las aguas residuales de las pequeñas poblaciones, se ponen a disposición de los técnicos encargados de su gestión multitud de posibilidades técnicas para abordarla. Es el ámbito preferente de las soluciones prefabricadas, donde estas alcanzan más sentido. Se hace necesario saber cuáles son las principales características que condicionan al proyecto para elegir la mejor solución. Más allá de soluciones mejores o peores, habrá que buscar soluciones que se adaptan mejor o peor.
Cuando la disponibilidad de electricidad es nula o limitada, cuando los caudales son muy irregulares y cuando las disponibilidades de recursos para el mantenimiento son limitados, la propuesta de Ecoflo® es muy sólida para alcanzar de forma estable la calidad deseable en el vertido.