Quedarían operando ambas calzadas en el kilómetro 89, donde la banca se fue desmoronando.
Aunque las obras para reparar el desprendimiento de la banca en la vía Buga-Buenaventura, a la altura del kilómetro 89, van en un 54 por ciento, la expectativa es que estén listas en diciembre próximo.
De ser así será uno de los mejores ‘regalos’ que recibiría el Valle del Cauca en ese mes, como Navidad, por estos trabajos que contrató el Instituto Nacional de Vías (Invías), con la firma Latinco, para hacer mejoras en drenaje y contención que permita la estabilización de la calzada norte y más estabilidad del suelo.
De manera que se espera que en diciembre, el desprendimiento sea solo un recuerdo y ambas calzadas con dos carriles vuelvan a funcionar para que por allí ruede la mitad del comercio que proviene del interior del país hacia el puerto de Buenaventura.
El anuncio lo hicieron, precisamente, funcionarios del Invías, a la comisión encabezada por la Cámara Colombiana de la Infraestructura en una visita el miércoles de esta semana. La directora de la seccional Occidente de la Cámara Colombiana de la Infraestructura, María Isabel Alvarado, dijo que es una de las noticias más positivas, pues ambas calzadas quedarían operando, sin el paso restringido del ‘pare y siga’, como viene realizándose hoy desde mediados de marzo pasado. La reparación del desprendimiento cuesta 5.189 millones de pesos.
“En este momento, Invías adicionó al contrato inicial que se veía solamente la conservación de la calzada existente, la que no se dañó; adicionó las labores de rehabilitación y reconfiguración de la calzada perdida”, explicó la directiva Alvarado.
“Esto quiere decir que teniendo esa adiciones de contrato, en diciembre se podría tener, nuevamente, la operación de este corredor, quedaría habilitado para tránsito”, dijo. Añadió que quedaría faltando la carpeta asfáltica a unos 80 metros, pero podría recuperarse el tránsito. Reiteró que quedarían habilitadas ambas calzadas para ir de Buga a Buenaventura y al contrario.
El avance no solo incluye las obras, sino los estudios para determinar por qué se desprendió la banca, aunque entre los principales factores figuran causas como drenajes insuficientes, un momento invernal que se presentó en marzo, un muro de contención que resultó también insuficiente más la falla geológica en esa zona. “Nos sorprendió positivamente” al destacar que Invías no solo estaría reafirmando el compromiso de contener y evitar que haya desprendimiento de la banca en la otra calzada, la que sigue en pie, sino fortalecer la que se desmoronó.
En un informe del Observatorio de Infraestructura del Valle del 30 de septiembre, se indicó que la ejecución de los estudios de geotecnia avanzada entre Mediacanoa y Loboguerrero deben adelantarse dentro del último trimestre del año 2019 para complementar la estructuración de dicho tramo con el trazado separado del piedemonte. Debe garantizarse la disponibilidad de los recursos para la financiación del corredor y la nueva malla vial por 4 billones de pesos.
En la visita se incluyó también las obras de la malla vial, mientras se adjudican en 2020 para que en diversos tramos no aumente el deterioro, como en la recta Cali-Palmira, cuyo mantenimiento empezó hace dos semanas.
El Tiepo