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Tras un prolongado tiempo de misterio, en el que no se halló ningún indicio sobre el accidente del Airbus 330-203 en el que 228 personas perdieron la vida, los equipos que investigan el caso están logrando avances.
En su primera inmersión, un robot submarino para aguas profundas encontró, este miércoles, el chasis de la caja negra, objeto clave para determinar las causas de la caída de la nave. El fragmento, que se encontraba rodeado de escombros, contenía uno de los grabadores de datos de vuelo, pero sin la unidad de memoria que daría pistas cruciales.
No obstante, el hallazgo, que se suma al descubrimiento semanas atrás de otros pedazos del avión, ha dado pie a la expectativa de que las dos cajas negras del aparato puedan ser encontradas.
Las investigaciones se dan en un radio de búsqueda de alrededor de 10 mil kilómetros.
Una vocera de la Oficina de Accidentes Aéreos francesa (BEA) indicó que el grabador de datos de vuelo aún podría estar en condiciones de ser utilizado, pese a su separación del chasis. "El módulo de la memoria es como un sarcófago, la información está muy bien protegida", explicó.
La especulación respecto a qué causó el accidente se ha concentrado en el posible congelamiento de los sensores de velocidad de la aeronave, que parecían entregar lecturas inconsistentes antes de que se perdiera la comunicación con el aparato.
Reuters | Buenaventuraenlinea