El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) de Estados Unidos anunció la extensión automática de los permisos de trabajo para ciertas categorías de inmigrantes, aumentando su validez a 540 días. Esta medida, que entrará en vigencia el 13 de enero de 2025, busca aliviar los retrasos burocráticos en el proceso de renovación y proteger los derechos laborales de cientos de miles de trabajadores migrantes autorizados.
La administración de Joe Biden implementó esta medida como parte de un esfuerzo por reducir interrupciones en la contratación de inmigrantes legales, quienes en ocasiones debían abandonar sus empleos mientras esperaban la renovación de sus permisos. Alejandro Mayorkas, secretario del DHS, destacó que esta extensión es crucial para minimizar los obstáculos burocráticos que afectan tanto a empleadores como a trabajadores migrantes.
“El incremento de la validez del permiso de empleo garantizará que cientos de miles de personas puedan continuar contribuyendo a sus comunidades sin interrupciones innecesarias”, declaró Mayorkas.
Los datos del Servicio de Inmigración y Ciudadanía (USCIS) muestran un aumento récord en las solicitudes de permisos de trabajo durante el último año, lo que subraya la necesidad de medidas para agilizar el proceso.
Activistas y abogados de inmigración han celebrado esta medida como un avance significativo. Todd Schulte, presidente de FWD.us, calificó la extensión como un “alivio crucial” para trabajadores y sus familias, destacando que ayudará a prevenir despidos y la pérdida de licencias de conducir debido a las demoras en el procesamiento.
Por su parte, Fernando Romo, abogado de inmigración y asesor de la Asociación de Salvadoreños de Los Ángeles (Asosal), subrayó la importancia de esta extensión ante la próxima administración del presidente electo Donald Trump, quien ha sido crítico de las políticas migratorias más flexibles. Según Romo, la medida brinda una protección adicional a los inmigrantes frente a posibles cambios en las políticas laborales y de deportación.
La extensión de los permisos de trabajo se suma a las más de 600 órdenes ejecutivas relacionadas con inmigración firmadas por Biden durante su mandato, superando las 472 emitidas por Trump en su primer período presidencial. Según el Instituto de Política Migratoria (MPI), estas acciones reflejan un enfoque proactivo para atender las necesidades de los inmigrantes autorizados en el país.
A pesar de los avances, defensores como Schulte instan al gobierno de Biden a aprovechar el tiempo restante para implementar medidas adicionales, como la redesignación del Estatus de Protección Temporal (TPS) para países que enfrentan crisis humanitarias.