Un reciente estudio ha revelado las preferencias de los colombianos a la hora de hacer sus compras de mercado, destacando el ascenso de las tiendas de bajo costo en la economía del país. Supermercados como D1, Ara, Dollarcity e Ísimo han ganado una significativa participación en el mercado colombiano, reflejando un cambio en los hábitos de consumo de los ciudadanos.
Las tiendas de bajo costo han experimentado un notable crecimiento en Colombia, convirtiéndose en las preferidas de muchos consumidores por sus precios competitivos y la variedad de productos que ofrecen. Supermercados como D1, Ara, Dollarcity e Ísimo han capitalizado esta tendencia, atrayendo a una amplia base de clientes que buscan maximizar su presupuesto sin sacrificar la calidad.
El estudio destaca que los colombianos valoran principalmente los precios bajos, la proximidad y la conveniencia a la hora de elegir dónde hacer sus compras. Las tiendas de bajo costo han logrado satisfacer estas demandas al ofrecer productos a precios accesibles, ubicaciones estratégicas y una experiencia de compra eficiente.
- D1: Con una presencia significativa en todo el país, D1 ha capturado una gran parte del mercado gracias a su modelo de negocio enfocado en precios bajos y productos de alta rotación. La cadena es conocida por sus ofertas constantes y su amplia red de tiendas.
- Ara: Este supermercado, perteneciente al grupo Jerónimo Martins, ha ganado popularidad por su enfoque en productos frescos y precios competitivos. Ara se ha destacado por su estrategia de expansión agresiva y su capacidad para adaptarse a las necesidades locales.
- Dollarcity: Especializada en productos de bajo costo, Dollarcity se ha posicionado como una opción atractiva para los consumidores que buscan variedad y precios asequibles. Su formato de tienda ha sido bien recibido por quienes buscan una experiencia de compra rápida y económica.
- Ísimo: Aunque más reciente en el mercado, Ísimo ha logrado captar la atención de los consumidores colombianos con su propuesta de valor basada en precios bajos y una oferta diversificada de productos.
El crecimiento de estas tiendas de bajo costo no solo refleja un cambio en las preferencias de consumo, sino que también tiene un impacto significativo en la economía colombiana. Estas cadenas han contribuido a la creación de empleos, la dinamización del comercio local y la oferta de productos accesibles a un amplio segmento de la población.
El estudio revela que las tiendas de bajo costo como D1, Ara, Dollarcity e Ísimo han cambiado el panorama del comercio minorista en Colombia, convirtiéndose en las preferidas de los consumidores. Su éxito se debe a su capacidad para ofrecer precios competitivos, conveniencia y una experiencia de compra satisfactoria. A medida que estas cadenas continúan expandiéndose, se espera que sigan desempeñando un papel crucial en la economía y en la vida cotidiana de los colombianos.
