El informe destaca la tortura de reclusos, los malos tratos, las detenciones y arrestos arbitrarios e ilegales, la desnutrición y la mala atención sanitaria.
Miles de personas se encuentran recluidas en instalaciones superpobladas en toda República Centroafricana con poco acceso a servicios básicos como alimentos, agua, saneamiento y atención médica.Esta alarmante situación se detalla en el informe por la oficina de derechos humanos de la ONU (ACNUDH) y la Misión de Estabilización de las Naciones Unidas en la República Centroafricana (MINUSCA).
‘Oportunidad crucial’ para la reforma
El Alto Comisionado, Volker Türk, dijo que estaba profundamente preocupado por las conclusiones del informe y pidió a las autoridades nacionales que adoptaran medidas urgentes y concretas.
Señaló que «las reformas en curso en el sistema penitenciario representan una oportunidad crucial para que la República Centroafricana aborde estas violaciones de los derechos humanos».
El informe, que abarca el período de enero a diciembre de 2023, enumera numerosas deficiencias, como el incumplimiento de los plazos legales de detención, la detención preventiva excesiva y las pésimas condiciones de las prisiones en general. También señala los desafíos a los que se enfrenta el poder judicial, aunque reconoce que las autoridades han logrado algunos avances.
El informe revela un preocupante patrón de arrestos y detenciones ilegales y arbitrarias por parte del ejército y las fuerzas de seguridad en la República Centroafricana, con más de 1.500 personas afectadas solo en 2023.
A finales de año, 1.749 personas se encontraban detenidas en espera de juicio, algunas de ellas durante casi seis años. El informe destaca que es preocupante que se hayan dictado órdenes de detención sin examinar suficientemente si el encarcelamiento era necesario y proporcional a los delitos de los que se acusaba a muchas de ellas.
Brotes de enfermedades
La desnutrición, la mala atención sanitaria y las malas condiciones de higiene han provocado brotes de enfermedades en las cárceles. El informe pide que se destinen recursos suficientes para satisfacer las necesidades básicas de los detenidos.
El informe insta además a las autoridades a respetar los plazos legales de detención y a que la prisión preventiva sea la excepción, no la regla, y esté justificada únicamente por los principios de necesidad y proporcionalidad.
El Sr. Türk también pidió que se llevaran a cabo investigaciones independientes y sin demora sobre todos los casos de tortura y malos tratos y que los responsables rindieran cuentas por sus actos. Hizo un llamamiento a todos los asociados para que apoyaran al Gobierno en la mejora de las condiciones de detención.
Tanto la Alta Comisionada como la Jefa de la MINUSCA, Valentine Rugwabiza, reconocieron los esfuerzos del Gobierno en materia de derechos humanos en las personas detenidas.
Estas medidas incluyen sesiones judiciales más frecuentes, la renovación y reapertura de tres prisiones en 2023 y la contratación de personal penitenciario adicional.
En apoyo de estos esfuerzos, prometieron seguir prestando asistencia de las Naciones Unidas al Gobierno para mejorar el respeto de los derechos humanos y el estado de derecho en la República Centroafricana, en particular en relación con el sistema de detención.