Una familia de 10 personas que fueron asesinadas la semana pasada en el municipio de Imbali, en las afueras de Pietermaritzburg, fue sepultada.
Se alega que un grupo de hombres armados asaltaron la casa y abrieron fuego contra la familia.
Se llamó a la policía y, tras investigar, fueron conducidos a una segunda escena donde algunas personas estaban realizando una ceremonia de limpieza.
Luego, un sospechoso murió durante un tiroteo con la policía, mientras que otro resultó herido y todavía está en el hospital.
Un sospechoso que ha sido arrestado en relación con los asesinatos ya compareció ante el Tribunal de Primera Instancia de Pietermaritzburg.