Redacción
En la «Conversación con líderes de ciudades innovadoras en Latinoamérica», llevada a cabo en el Latam Mobility Virtual Summit 2021, se desarrollaron temas de tecnología y digitalización para mejorar los servicios de transporte público y adaptarlos a las transformaciones que surgieron en el 2020.
Roberto Capuano, director general de Metrobús de la Ciudad de México, destacó tres tendencias importantes. La primera es la conectividad, que no solo es el vehículo rodante con las estaciones, también la estructura entre personas. «La visión es tener mayor capacidad de gestión del servicio a través de centros de control avanzados».
La segunda tendencia es el sistema de recaudo, por lo que México concedió un contrato para la aceptación de tarjetas de crédito en siete líneas. La tercera es la movilidad eléctrica que implica la innovación tecnológica realizada en Metrobús para brindar mejor experiencia al usuario en cuanto a servicio, seguridad, rapidez y confiabilidad en el sistema.
La experiencia en Bogotá
En relación a las formas en que las autoridades locales y los servicios de transporte público aprovechan la tecnología y la digitalización para mejorar y optimizar el transporte público, Felipe Ramírez, gerente de TransMilenio, el sistema de transporte masivo de Bogotá, refirió que trabajan en cuestiones eléctricas, logrando cambios trascendentales.
«El año pasado fue de retos pero se dieron pasos importantes en el ámbito tecnológico para ofrecer a los usuarios, información en tiempo real y de esta forma, predecir su comportamiento para tener flota disponible con medidas de bioseguridad necesarias».
Agregó que el año pasado introdujeron la TransMi App, que permite en tiempo real, tener información completa de la ciudad y entregarla a los usuarios para que conozcan en dónde esta el autobús que necesitan abordar.
Nicolas Estupiñán, secretario de Movilidad, habló de las acciones que Bogotá adapta en su infraestructura urbana para dar solución a las nuevas necesidades de micro movilidad y a la redistribución del espacio público, respetando la sana distancia y descongestionando el transporte público.
Rumbo al cambio
Manuel Olivera, representante del Grupo de Liderazgo Climático conocido como C40, destacó que el valor de un autobús eléctrico con todos los costos incluidos, es igual y a veces menor al de uno a diésel, lo cual fue probado por diferentes instituciones de las que no dio nombre.
«Cada vez que inicia un proceso tecnológico que puede generar una transformación profunda en la forma de vivir, salen diferentes contrincantes y la electromovilidad tiene un enemigo en los combustibles fósiles. Esta transformación, es transicional».
En Bogotá se decretó un proceso de cambio y al día de hoy, tiene 1,485 autobuses, lo que va a posicionarla como la flota más grande de América Latina y del mundo, fuera de China.
Indicó que el sistema de transporte cero emisiones, ayuda a ordenar la ciudad con autobuses, taxis y bicicletas, entre otros.
Desafíos para introducir tecnología
Yosutoshi Miyoshi, director de Hitachi PowerGrids, expresó que el reto para generar tecnologías, es saber cómo ser atractivo y por otra parte, el desafío para introducirlas tiene que ver con cuestiones regulatorias.
Informó que algunos estudios utilizan la tecnología para evaluar el tráfico de los pasajeros y de esta forma, hacer planificaciones y optimizarlo.
«Ello junto con la inteligencia artificial y la conexión a celulares, indica que la tecnología está disponible y solo es necesario juntarla y diseñar soluciones. Al respecto, es necesaria la colaboración del sector público con el privado para que juntos desarrollemos soluciones en beneficio de los usuarios».
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