Redacción
La isla de Malpelo, uno de los santuarios naturales colombianos ubicado a unos 500 kilómetros del puerto de Buenaventura, Valle del Cauca, atraviesa hoy por una grave crisis ambiental por cuenta de la pesca ilegal que, literalmente, está saqueando la zona.
Así lo denunciaron la Fundación Malpelo y la Asociación Colombiana de Pesca Artesanal, Acodiarpe, aduciendo que la operación de buques de Ecuador y Costa rica en el islote, de manera ilegal, viene ocasionando grave daño a la población de tiburones martillo.
La situación denunciada por Felipe Ladino de la Fundación Malpelo es grave: según reseñó, a estos peces los despojan de su aleta y luego los botan al mar, casi moribundos, donde acaban muriendo. Estas extremidades son vendidas en el mercado asiático en un valor promedio de 200 dólares el kilo, un mercado creciente que motiva este ilícito.
«Es un hecho terrible el que está pasando en la zona de Malpelo. Allí están operando embarcaciones de Ecuador y Costa Rica, generando un grave problema de pesca ilegal de tiburón martillo, pargos, atunes, otros peces. Este hecho se tiene cometiendo desde hace varios años. En los últimos diez, la población de tiburón martillo se ha reducido en un sesenta por ciento en esa parte del mar pacífico», dijo Ladino a ‘Caracol Radio’.
Recalcó que en la zona de Yuruparí, hay ocasiones en que hasta 20 embarcaciones de dichos países se ven juntas propiciando dicha actividad, reclamando por una falta de una política pesquera que, a su juicio, puede poner fin a la problemática.
